Civiles armados matan a 6 policías estatales en una emboscada en Guerrero

Policías estatales fueron emboscados por civiles armados del grupo delictivo comandado por Roberto Carlos "Z"., alías "El Pelón",  en las inmediaciones de la comunidad de El Gavilán, en el municipio de Taxco, Guerrero, en un hecho que dejó a 6 oficiales muertos y cinco heridos, entre ellos una mujer policía.

El ataque ocurrió al filo del mediodía de este domingo 21 de junio, sobre la carretera El Gavilán a San Gregorio, en el municipio de Tetipac, en las cercanías de las localidades de Taxco El Viejo y Pilcaya.

En las imágenes difundidas en redes sociales se aprecia una camioneta de la Policía estatal, tipo RAM, con doble cabina (rotulada con el número 541) que presenta decenas de impactos de bala, lo mismo en el parabrisas que en las puertas laterales.

De acuerdo a información oficial, los policías de Guerrero "realizaban acciones de prevención del delito en esta zona del estado, cuando civiles armados atacaron a los uniformados".

Versiones extraoficiales señalan que los agresores viajaban en otro vehículo  --al parecer  una camioneta azul tipo Explorer-- y que al registrar la violenta agresión  los agentes policíacos intentaron repeler a sus atacantes. 

Como parte de las primeras investigaciones, en el lugar de los hechos se recabaron casquillos de arma AK-47 (de las conocidas como "Cuerno de Chivo"),  7.62 x 39 mm, así como del fusil de asalto AR-15, calibre .223.

De acuerdo a medios locales, los policías heridos fueron trasladados al hospital general Adolfo Prieto, en la cabecera municipal de Taxco.  

En su comunicado oficial, el gobierno de Guerrero, a cargo del gobernador Héctor Astudillo, condenó los hechos, que atribuyó a un grupo delictivo que opera en la zona, el cual estaría presuntamente lidereado por Roberto Carlos "Z"., alías "El Pelón".

Asimismo, hasta el momento el comunicado oficial no menciona si los elementos de seguridad pública estatal lograron herir o abatir a alguno de los agresores.

Como es de esperarse, el hecho delictivo provocó una intensa movilización de fuerzas armadas, entre ellas de elementos de la Guardia Nacional, del Ejército y Policías Ministeriales, quienes resguardaron la zona e implementaron un operativo para dar con los responsable de tan sangriento suceso.