Flaquean las arcas de estados ante la 3ª ola

Los gobiernos de al menos cuatro estados han reconocido que no cuentan con más recursos económicos para enfrentar la tercera ola de la pandemia de Covid-19 que, en algunos casos, ya suma más contagios que en las dos olas previas.

El mandatario de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme, externó que la entidad no podría reconvertir la misma cantidad de camas para brindar atención a pacientes con el virus, que las mil 474 que se abrieron en diciembre del año pasado ante los embates de la segunda ola.

“Implica un gasto (para el que) el estado ya no tiene el recurso”, advirtió, al solicitar a la población conciencia y responsabilidad para dar continuidad a las medidas de distanciamiento social y uso de cubrebocas para frenar la propagación del virus, en una entidad que, aunque aún no alcanza los niveles de contagio de diciembre pasado —cuando llegó a registrar hasta 497 casos en un día—, en esta tercera ola, semana tras semana, presenta un aumento de casos, con hasta 300 diarios en la primera quincena de agosto.

Una situación similar se vive en Nuevo León, que esta semana regresó al rojo en el semáforo epidemiológico y que, con hasta mil 433 casos en un día, registrados durante esta ola, la entidad ya superó sus picos registrados en enero pasado —con mil 44 casos en 24 horas— y julio del 2020 —con 518, durante la primera ola—.

Ante la situación, el gobernador del estado, Jaime Rodríguez Calderón, llamó a la Federación a apoyarlo con recursos, toda vez que en la entidad ya no tienen “ni un peso para invertir en este tema”.

Los gobiernos estatales de Colima y Tabasco también han asegurado que el gasto extraordinario que implicó hacer frente a la contingencia ha tenido un impacto en las finanzas estatales.

En el caso del primer estado, que además enfrenta una crisis que ha dejado sin salario a miles de trabajadores, el gobernador José Ignacio Peralta explicó que el gasto no contemplado para enfrentar la contingencia es uno de los factores que dejó sin liquidez a la entidad, que pasa por uno de los momentos más complicados en la cuestión sanitaria, con hasta 391 casos positivos en un solo día durante la quincena en curso, 344 por ciento más que su pico registrado en toda la pandemia, que fue de 88 casos en enero.

Ayer, el mandatario indicó que se han reconvertido 218 camas; sin embargo, alertó que “no ha sido suficiente”, debido a la alta demanda de hospitalizaciones.

Detalló que se gestionó ante el Gobierno federal la apertura de hospitales móviles para atender a 50 pacientes, aunque hasta el momento se ha autorizado uno, con capacidad para 15.

Tabasco también reporta cifras alarmantes del virus, con 814 en un día en lo que va de este mes, una cifra no vista en el estado desde que inició la pandemia.

Aunque el Gobierno encabezado por Adán Augusto López no ha referido que tenga falta de recursos para enfrentar la contingencia, el mandatario reconoció que la pandemia generó gastos que no estaban previstos —como el gasto diario de 200 mil pesos sólo para la aplicación de pruebas Covid—, uno de los factores por los que su administración tiene una deuda de cuatro mil millones de pesos.

PARO Y SATURACIÓN EN EL INER

La tercera ola mantiene en alerta la atención hospitalaria en la Ciudad de México, que hasta el martes tenía 75.8 por ciento de ocupación en sus hospitales con Unidades de Cuidados Intensivos (UCI). En la capital, nueve hospitales están saturados al 100 por ciento, entre ellos, el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER), donde en medio de la crisis algunos investigadores entraron en huelga desde ayer, para protestar por la precarización de sus empleos que, dicen, no han sido reconocidos.