Pide a las autoridades unirse por la paz

Iglesia tiene valor para denunciar violencia, pero se enfrenta a grandes poderes: Arzobispo de Monterrey

El tráfico de drogas y la trata de personas son los delitos que más preocupan a la Iglesia; aseguran que el COVID-19 detonó la violencia en diferentes zonas

Rogelio Cabrera López, arzobispo de Monterrey.
Rogelio Cabrera López, arzobispo de Monterrey.Foto: Especial.
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El arzobispo de Monterrey, Rogelio Cabrera López aseguró que los sacerdotes en el país tienen le valor de denunciar el tráfico de drogas y asesinatos que se viven en los territorios, sin embargo, tiene que hacer frente a los grandes poderes.

“Sí, vivimos en un contexto en el que cualquier palabra y opinión puede llegar a ser una causa de la violencia. Esto sucede especialmente en algunas zonas de mayor conflicto. Es importante, por parte de los sacerdotes, y el valor de denunciar las situaciones de violencia y delincuencia. Al mismo tiempo, advertimos a nuestros sacerdotes que tienen que ver con los poderes que son verdaderamente fuertes”, aseveró.

En este sentido detalló que la Iglesia debe usar su voz para convencer a las autoridades para unirse a las fuerzas de paz. Además, aclaró que el tráfico de drogas, la trata de personas son los delitos que más preocupan a las autoridades religiosas. “Los comportamientos que tienen como objetivo a los ingresos millonarios, la violencia es el resultado de un deseo ilimitado de dinero. De esto, podemos hacer que la creación de un arte de la paz, que debe involucrar a cada persona y cada grupo social, y así sucesivamente”, indicó.

El religioso mencionó que el verdadero reto es reconstruir el tejido social y en la iglesia, pues aclaró que los orígenes de la violencia se encuentran en el nivel más pequeño, por ello cada familia tiene la responsabilidad de hacer un medio ambiente amable y respetuoso. Otro de los factores que dijo afectaron a los mexicanos en los meses pasados son los relacionados a la pandemia ya que por ellos, también aumentó la violencia.

“Sí, se debe reconocer que la pandemia ha puesto de relieve tres cuestiones: la calidad de los servicios de salud, la crisis económica y de empleo, y, de hecho, se ha mostrado aún más evidencia de que el clima de terror y violencia”, dijo.

De acuerdo al arzobispo de Monterrey, en los dos últimos años, la vida social en México era muy limitada por la pandemia que produjo el COVID-19, lo que detonó la violencia en diferentes zonas del país donde se han visto episodios de terror.

lemm.