Protagonistas de "Duda Razonable" abandonan cárcel en Macuspana, Tabasco

Luego de siete años en prisión, Juan Luis López Garza, Héctor Muñoz Muñoz y Gonzalo García Hernández, acusados de intento de secuestro, fueron liberados mediante un amparo liso y llano otorgado por unanimidad de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

Bajo el proyecto elaborado por el ministro Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena y apoyado por el pleno, el alto tribunal del país concluyó que no encontró elemento alguno para justificar la sentencia a 50 años que le fue dictada a los quejosos.

“La conclusión es clara: este caso exhibe una insuficiencia probatoria tan patente, que la defensa pudo haber ejercido el derecho a guardar silencio —es decir, pudo haber callado, pudo no haber ofrecido una teoría alternativa de los hechos— y aun así estaríamos en condiciones de afirmar que la fiscalía no reunió los elementos necesarios para soportar la carga probatoria que le correspondía… Debemos dejarlo claro: para todo efecto formal, los quejosos son inocentes. No se ha acreditado su responsabilidad penal”, indicó la Corte.

Por este motivo, se aprobó otorgar un amparo liso y llano a los tres señalados, dejar sin efectos su sentencia de condena y se ordenó su liberación inmediata.

En la tercera y última sesión del pleno de ministros, dedicada al caso conocido como “Duda razonable”, derivado del documental que se elaboró sobre los hechos, Ortiz Mena presentó el proyecto. 

“Este asunto se caracteriza por presentar múltiples vicios de debido proceso, todos derivados de una violación fundamental al principio de presunción de inocencia… Durante el desahogo de la audiencia del juicio oral, se concedió una ventaja indebida a la fiscalía, supliéndole la deficiencia de la queja y otorgando un peso preponderante e injustificado a sus pruebas y su teoría del caso”, mencionó.

Al encabezar su última sesión como ministro presidente de la SCJN, Arturo Zaldívar argumentó que tomar en serio la presunción de inocencia exige analizar de forma “completa, exhaustiva y escrupulosa” todas las pruebas desahogadas en el juicio, pues “sólo así será posible llegar a la conclusión de que la hipótesis de la acusación cuenta con un grado de corroboración, más allá de la duda razonable”.

Además, subrayó que la condena únicamente se basó en los testimonios de la presunta víctima y su hijo, las cuales no se corroboraron y porque persisten dudas sobre cómo sucedieron los hechos.

“A lo largo de estos cuatros años hemos dictado muchas sentencias, tanto las salas como el pleno; ahí están las sentencias, para que los críticos de la Corte nos juzguen por nuestras sentencias. La Corte ha actuado con independencia y con autonomía. Que saquen estadísticas. Que saquen datos y, sobre todo, que analicen los argumentos. Descalificar es muy fácil, insultar también”, dijo el ministro presidente.

Alrededor de las 14:00 horas, desde Macuspana, Tabasco, familiares escucharon el fallo de la Corte.

“¡Se acabó, se acabó!” se decían entre ellos, a la vez que intercambiaban abrazos para calmar el llanto.

Ayer mismo, Juan Luis López Garza, Héctor Muñoz Muñoz y Gonzalo García Hernández abandonaron el penal de Macuspana, en Tabasco, donde permanecían desde hace siete años y medio.

JVR