Foto: Cuartoscuro
México.- El representante del PRD ante el Instituto Federal Electoral (IFE), Rafael Hernández, consideró que la política de alianzas por la renovación de la dirigencia nacional del partido no se puede usar como “moneda de cambio”.
En entrevista, el representante partidista recordó que el estatuto del Partido de la Revolución Democrática (PRD) establece un procedimiento muy complicado para constituir una alianza.
Agregó que para que la alianza se concrete, tiene que aprobarla una mayoría calificada del Consejo Estatal del partido, luego, la Comisión Política Nacional, y posteriormente del Consejo Nacional, por lo que la política de alianzas la resuelve el partido.
Hernández Estrada señaló que quien no esté de acuerdo con ello se encuentra en todo su derecho, pero no se puede imponer a los órganos del partido y lo que establece el estatuto.
Por ello, insistió, la política de alianzas no se puede poner como “moneda de cambio” para la renovación de la presidencia nacional, ya que ésta se define por los órganos partidarios y no puede ser de otra manera.
Agregó que si alguien no está de acuerdo con esa política debe ir al Consejo Nacional y manifestar que no quiere una alianza electoral con el Partido Acción Nacional (PAN) para contender por la gubernatura del estado de México, pues para impulsarla se requiere de una mayoría calificada de dos terceras partes.
Una vez que las “tribus” acordaron que a mediados de marzo de 2011 se concretará el cambio en la dirigencia nacional del partido, Andrés Manuel López Obrador debería ir al Consejo, “para que no nos enteremos de sus opiniones a través de los medios”.
Aclaró que ni siquiera necesita la mayoría de los votos del Consejo Nacional, pues con que complete una tercera parte lo puede hacer, pero implica que debe aceptar las reglas del partido e ir como un consejero más a dar su opinión.
Consideró que López Obrador actúa al margen; no recurre a las instancias del partido porque hacerlo sería aceptar que el PRD tiene reglas y, si conforme con los estatutos y reglas para determinar alianzas se aprueba una con la que él no esté de acuerdo la tendría que aceptar.
Hernández Estrada sostuvo que ni al ex candidato presidencial, Andrés Manuel López Obrador, ni al jefe de gobierno capitalino, Marcelo Ebrard Casaubon, les conviene mantener un pleito en el seno del PRD.
Finalmente, señaló que no se puede cambiar la decisión de los órganos del partido por la opinión de alguien, por lo que si el G-8 demanda la expulsión de Jesús Ortega, “creo que eso es incorrecto; ojalá que se serenen los ánimos y se pueda llegar a un acuerdo”.
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