Júpiter López Ruíz, Juez Décimo Penal del Distrito Federal, dictó auto de formal prisión a Alejandro Omar Mejía Vázquez, preso desde el 17 de marzo pasado por el robo de un calzón usado y un cable para Ipod, ambos valuados en 40 pesos.
Con esa decisión el ahora procesado --quien es primo delincuente--, estará cuando menos tres meses entre homicidas, secuestradores y violadores. Y es que ese es el tiempo estimado que dure el juicio sumario que enfrentará.
De ser encontrado culpable, Mejía Vázquez, de 27 años, podría pasar hasta ocho años en prisión, sin el beneficio de la libertad bajo fianza. Esto debido a que el Ministerio Público de la Fiscalía en Tlalpan tipificó el robo como grave.
Según lo inscrito en el expediente el caso derivó de un supuesto robo en el departamento 401 del edificio número 34, de la calle Ciprés, colonia Prado Coapa, delegación Tlalpan.
Mariela Ovando Valverde, propietaria del inmueble, dijo que al llegar a su casa vio que su puerta ya no tenía un candado y detectó la falta de un cable para Ipod y en su ropero advirtió que su ropa íntima estaba revuelta.
Al cuestionar al conserje del inmueble, Francisco Nape Polito, este aseguró que la única persona extraña que ingresó al edifico fue el vendedor de agua a quien, incluso dijo haber visto saltar la barda de uno de los departamentos,
Con base en ese dicho, se dio intervención a policías en bicicleta quienes hallaron al repartidor de agua, identificado como Alejandro Omar Mejía Vázquez, pues éste continuaba laborando en la zona.
Los uniformados le pidieron “aclarar un problema” con una vecina, a lo que el vendedor no opuso resistencia.
Al ser sometido a una revisión de rutina, los policías no le encontraron ningún objeto robado.
Pese a lo cual fue señalado por el conserje como la persona que ingreso al inmueble y saltó una barda, aunque nunca haberlo visto salir con los objetos robados.
Entonces, los policletos pusieron al detenido a disposición de sus compañeros Eduardo Esquivel Molina y Carlos César Moreno Velázquez, tripulantes de la patrulla P7013 del sector Coapa.
Éstos últimos, sin presencia del Ministerio Público u otro testigo, revisaron la camioneta en la que laboraba Mejía Vázquez en la que dijeron haber encontrado una tanga blanca, sin talla y con un estado medio de deterioro; así como un cable para Ipod. Mariela Ovando Valverde reconoció la propiedad de ambos.
Peritos de la procuraduría capitalina valuaron el monto del botín en 40 pesos, de los cuales 25 corresponden al cable y 15 a la tanga. Con base en dichos elementos, el Ministerio Público consignó el expediente por el delito de robo con violencia agrado, por haberse cometido el robo en una vivienda.
ams
