El Departamento de Estado de Estados Unidos perfila clasificar como terroristas a seis organizaciones delictivas mexicanas: el Cártel Jalisco Nueva Generación, el Cártel de Sinaloa, el Cártel del Noreste, la Familia Michoacana, Cárteles Unidos y el Cártel del Golfo, a los que se les acusa por el trasiego de droga, principalmente fentanilo, y por el tráfico de personas.
De acuerdo con un reporte del diario The New York Times (NYT), los países con grupos criminales de importancia para el vecino del norte son Colombia, El Salvador, México y Venezuela.
Además, se mencionó que los cárteles, en su conjunto, trabajan de manera coordinada con el Clan del Golfo (el principal cártel del narcotráfico de Colombia) para trasladar drogas y migrantes en la zona fronteriza entre ambas naciones. Se conoce que el Clan se apoya de los grupos mexicanos para trasladar cocaína hacia Estados Unidos.
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Los grupos criminales han logrado estructurar, a través de la trata de personas, un negocio de miles de millones de pesos, ya que organizaciones civiles denuncian que son ellos los que coordinan las rutas de trata de personas y migrantes. Incluso, activistas en derechos humanos aseguran que la extorsión y el secuestro es su modus operandi.
Entre las organizaciones criminales internacionales se encuentra el Tren de Aragua, de Venezuela; al Clan del Golfo, de Colombia, y la Mara Salvatrucha o MS-13, señalada como salvadoreña, aunque originalmente surgió en California, EU.
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El pasado 20 de enero, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó un decreto para reforzar el combate contra los grupos criminales, pues desde su campaña afirmó que son un peligro para su nación, por el tráfico de armas, personas y drogas que realizan.
Las fuentes dijeron al NYT que el Departamento de Estado ya informó a varios comités del Congreso de las próximas designaciones. De esta forma, se espera que en los siguientes días o semanas se fortalezcan las acciones ya existentes, como el envío de criminales a Guantánamo.
