Por quinta ocasión desde que Donald Trump consiguió su reelección para la Presidencia de Estados Unidos, la noche de este miércoles la Presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo, sostuvo una nueva llamada telefónica con su homólogo estadounidense.
Sin dar detalles, la mandataria mexicana compartió, por medio de una breve publicación en redes sociales, que continuará la búsqueda de acuerdos que resulten positivos para ambas naciones.
“El día de ayer tuvimos una llamada con el presidente Trump. Como lo menciona en su cuenta, fue muy productiva. Seguiremos dialogando para alcanzar buenos acuerdos que beneficien a nuestros países y nuestros pueblos”, dijo.
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El presidente estadounidense tampoco ofreció detalles sobre este diálogo. Únicamente refirió la llamada como una de las demás conversaciones que sostuvo con otros representantes internacionales, lo cual celebró.
“Ayer tuve una conversación muy productiva con la Presidenta de México. Asimismo, me reuní con los representantes comerciales japoneses de más alto nivel. Fue una reunión muy productiva. ¡Todas las naciones, incluida China, desean reunirse! ¡Hoy, Italia!”, dijo.
Esta charla se da en medio de los diferendos y negociaciones arancelarias que no han cesado entre ambos países.
Apenas esta semana, el republicano advirtió la aplicación de impuestos al jitomate mexicano, lo cual es producto de una inconformidad que data de hace casi tres décadas en las que Estados Unidos ha acusado a México de incurrir en dumping, una práctica para subsidiar a sus productores y así éstos puedan ofrecer sus artículos alimentarios a un menor costo, lo que pondría en desventaja a los tomateros estadounidenses.
En su conferencia de este martes, la mandataria respondió que buscarán llegar a un nuevo acuerdo, pues además negó que México incurra en dumping.
Asimismo, advirtió que su gobierno podría activar la aplicación de una “cuota compensatoria” contra Estados Unidos en relación a las exportaciones de pollo, respecto de lo cual sí se ha demostrado que incurre en prácticas desleales para su comercialización; además de esto, adelantó que se trabaja en otro proceso por la misma causa, pero relacionado con las exportaciones de pierna de cerdo.
La primera llamada que sostuvieron ambos mandatarios fue el 7 de noviembre, luego de que se ratificara el triunfo electoral del republicano, en donde confiaron en que habría una buena relación.
La segunda se dió el 27 del mismo mes, cuando Trump ya comenzaba a advertir amagos arancelarios por inconformidad con México en cuanto a la crisis migratoria y la de seguridad. En dicho diálogo, además de negar que la situación presentara un incremento, se le planteó al mandatario la búsqueda de colaboración con respeto a la soberanía mutua.
Una tercera conversación llegó el 3 de febrero, cuando se consiguió una primera prórroga de un mes para que no se aplicaran aranceles a cambio de que ambas administraciones implementaran acciones para atender problemas en común, como lo ha sido el trasiego de drogas y de armas; el segundo aplazamiento se logró tras la cuarta llamada del 6 de marzo, en donde se decidió pasar la decisión tarifaria al 2 de abril, en donde México consiguió un trato preferente debido al tratado comercial de las dos naciones con Canadá.
