En México, tres de cada cinco padres podrían estar exponiendo a sus hijos a hipersexualización e hiperexposición en redes sociales, lo que fomentaría una de las violencias modernas que hoy enfrentan los niños y niñas en México, consideraron especialistas.
“No es fácil trazar el límite: uno quiere presumir la familia y acaba compartiendo momentos muy personales de los hijos; a esto se le añade la pesadilla de todos los padres: la presencia de pederastas en Internet. Y hay más amenazas. En México, al menos tres de cada cinco padres comparten imágenes de sus hijos, sin ninguna regulación”, en un fenómeno conocido como sharenting, afirmó Fernando Ayala Montes, trabajador social de la Universidad Veracruzana.
- El Dato: En 2007, la Asociación Americana de Psicología denunció la tendencia a sexualizar a los niños con publicaciones que resaltaban el éxito por sus atributos físicos.
Dijo que un estudio realizado por Barclays estimó que para 2030, dos tercios de los robos de identidad de infantes podrían atribuirse al sharenting, mientras que una investigación de Microsoft mostró que para ese mismo año, “el exceso de información sobre los niños en las redes sociales podría ser la causa principal de más de dos tercios de los robos de identidad”.

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Destacó que para los padres, en la era de la sobreexposición y el reconocimiento inmediato, “no es fácil trazar el límite sin ver que esto constituye una violencia a los hijos; esto no se veía antes, se protegía la intimidad”.
Señaló que el sharenting es el paso previo a convertir la publicación de contenido familiar en un negocio que las redes sociales han vuelto muy lucrativo y al que todos quieren entrar con el afán de ver triunfar y hacer famosos a sus hijos por sus habilidades, o simplemente mostrar la parte más íntima de su vida.
Gabriela Orozco, académica de la Facultad de Psicología de la UNAM, señaló que la publicidad de juguetes, películas, videojuegos, videos musicales y moda dirigida a los niños contribuye a generar una hipersexualización cada vez más precoz en la infancia, en especial en las niñas de entre cinco y nueve años, y este es un tema que está fomentado y permitido por los padres llamados “modernos”.
La especialista en conducta infantil señaló que la hipersexualización exalta la sexualidad de los pequeños, al ser presentados como “miniadultos”, y que hay muchos padres que “en redes sociales parecieran presumir el adelanto de ideas y edad de sus niños; este proceso es innatural e insano para su desarrollo, pues podría afectar su salud mental y psicológica, además de propiciar a más corta edad ansiedad, depresión, insatisfacción corporal y trastornos alimentarios”.
Destacó que la tendencia sexualizadora provoca que las pequeñas busquen la aceptación de los demás en función de su físico, lo que disminuye sus habilidades cognitivas, las empuja a adoptar un rol pasivo y genera infantes frágiles.
El Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna) explica que el fenómeno de la hipersexualización consiste en la exaltación de los atributos sexuales de una persona, por encima de otras cualidades.
En el caso de menores, dicho fenómeno ha sido invisibilizado, normalizado e incluso legitimado a través de los medios.
Se estima que una de cada 10 mujeres de 12 a 17 años en México ha recibido mensajes, videos sexuales o amenazas en Internet, y que al 3.8 por ciento de las adolescentes les publicaron información íntima o falsa en redes sociales para dañarlas. Y el 25 por ciento de las y los adolescentes entre 12 y 17 años ha sido víctima de alguna forma de ciberacoso.

