Ataques en la UNAM abren debate

Alertan riesgo de que escuelas repitan violencia como en EU

Especialistas explican que la agresión es un proceso amplio en el que los autores generan terror y transmiten ideología; la universidad debe vigilar protocolos y analizar su seguridad

La comunidad universitaria colocó ayer un altar de flores y listones en el CCH Sur en memoria del estudiante Jesús Israel. Foto›Cuartoscuro


Los recientes episodios violentos en instalaciones de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), incluido el asesinato de un estudiante del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) Sur, y las amenazas con artefactos explosivos reportadas en distintos planteles y la agresión de alumnos a profesores, abrieron el debate sobre si México se encuentra cerca de experimentar escenarios similares a los que han marcado a escuelas en Estados Unidos.

Al respecto, el especialista en seguridad y defensa Abraham Serrano consideró que la respuesta no es simple, pero advierte que el país vive un proceso de vulnerabilidad creciente.

“En EU, con instituciones más sólidas, policías mejor equipadas y tecnología avanzada, ocurren constantemente atentados en escuelas. ¿Cómo nos va a ir a nosotros si no contamos con instituciones que vayan a la misma velocidad con la que se transforma nuestra sociedad?”, señaló.

  • El Dato: Las facultades de Economía y Derecho de la UNAM suspendieron actividades tras una amenaza de presunta bomba el 18 de septiembre.

Explicó que la violencia en México no puede analizarse como hechos aislados, sino en un proceso amplio en el que los criminales adoptan “prácticas terroristas” como divulgación de mensajes violentos, uso del miedo como estrategia y adoctrinamiento de jóvenes vulnerables. “El narcotráfico hace lo mismo que los terroristas: suben videos de ejecuciones para generar terror y transmitir ideología”, dijo.

En su lectura, universidades y preparatorias se vuelven espacios estratégicos de riesgo, pues dijo, “son sitios donde los jóvenes buscan identidad, pertenencia e incluso, son expuestos a drogas sintéticas que, combinadas con la ideología, pueden detonar comportamientos agresivos”.

Existe un contraste claro con el país vecino, dijo: “En EU las instituciones tienen mayor capacidad operativa, aun así, padecen tiroteos en escuelas. En México, valores familiares y religiosos han frenado que esa violencia se repita”.

La comunidad universitaria colocó ayer un altar de flores y listones en el CCH Sur en memoria del estudiante Jesús Israel. Foto›Cuartoscuro

Insistió en que “todavía tenemos una sociedad sólida. La familia, la religión, el matrimonio eran frenos éticos que contenían la violencia. Pero hoy transitamos hacia una sociedad líquida, sin esos anclajes, y eso nos hace más vulnerables”, dijo.

 Advirtió que, si las instituciones mexicanas no se fortalecen, y si no se reconstruyen los valores éticos y sociales desde la educación, el país podría reproducir los escenarios de violencia escolar de EU.

“Ya no es el caso de un accidente con un arma en casa. Si se combinan drogas, ideología y la falta de instituciones sólidas, veremos más actos violentos en universidades y colegios, tanto en las grandes ciudades, como en zonas rurales”, sostiene.

La UNAM cuenta con protocolos para casos de agresiones dentro y fuera de sus instalaciones, entre ellos, rondines, cierres de accesos, urgencias médicas y denuncias ante autoridades ministeriales.

Karen Cuevas, profesora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de la UNAM, cuestionó que los procedimientos se queden en el papel: “De nada sirve tener un protocolo si no se cumple. La universidad debe hacer un examen de conciencia y hacer lo necesario para evitar que lo ocurrido en el CCH Sur se repita”.