Así que el Papa León XIV, abordado en un ‘chacaleo’ de medios en su residencia suburbana de Castel Gandolfo, invocó la vieja máxima mexicana del “Son de la Negra” para responder si viene o no a nuestro país. Y es que el Pontífice dijo que sí, pero no dijo cuándo. Lo que sí, nos hacen ver, es que ya hay al menos dos invitaciones al líder de la Iglesia católica: una trasladada al Vaticano de manera oficial por la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, y otra más informal, nos dicen, en una plática cercana entre León y el arzobispo primado de México, Carlos Aguiar Retes, quien aprovechó la oportunidad durante el cónclave en que los cardenales lo eligieron Papa. A juzgar por la respuesta del obispo de Roma, hay grandes posibilidades de que esa visita, anhelada por los más de 97 millones de católicos mexicanos, ocurra pronto, pues el Papa nombró a México entre los destinos que tiene contemplado pisar, en particular la Basílica de Guadalupe.

