Y nadie puede obviar las acciones del Gabinete de Seguridad contra el crimen organizado, no sólo en este primer año del sexenio de la Presidenta Claudia Sheinbaum, sino con las detenciones anunciadas ayer, de miembros clave del Cártel de Sinaloa. Esto, nos dicen, tampoco pasó desapercibido en Estados Unidos, donde aun con las presiones de Donald Trump, más de uno de sus funcionarios reconoce la cooperación y el trabajo para combatir la inseguridad. Es el caso, nuevamente, del embajador estadounidense en nuestro país, Ronald Johnson, quien destacó en sus redes sociales los esfuerzos del Gobierno de México para golpear “directamente la estructura y el financiamiento de uno de los principales cárteles”. El diplomático, quien compartió imágenes de los arrestos, comentó que no se trata de un movimiento aislado, sino que representa un acto que debilita la capacidad del narco y demuestra el resultado del trabajo conjunto en ambos lados de la frontera. Ahí el dato.

