Aumenta 1,152% decomiso de fentanilo en cuatro años

Del 1 de enero del 2019 al 16 de marzo del 2023, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) incautó tres mil 295.050 kilogramos de fentanilo en ocho estados del país, y Sinaloa es la entidad con mayor decomiso de la droga sintética en la administración federal actual.

En marzo pasado se dio a conocer que, del 1 de diciembre del 2018 al 7 de marzo del 2023, el Gobierno federal incautó seis toneladas y 661 kilos de esta droga, lo cual representa, se mencionó entonces, un incremento de mil 152 por ciento, comparado con todo lo decomisado durante el sexenio anterior.

De acuerdo con documentos a los que accedió La Razón, la cifra incautada solamente por la Sedena es la mitad de la reportada en marzo por el Gobierno federal y Sinaloa encabeza la lista en incautaciones, con mil 106.535 kilogramos; sólo esa entidad, identificada como cuna del Cártel de Sinaloa -uno de los grupos delictivos descritos por Estados Unidos entre los mayores productores de fentanilo-, representa 33 por ciento del total incautado.

Las entidades que le siguen son Sonora, con mil 097.986 kilogramos; Baja California, con 973.483; Coahuila, 100; Nuevo León, 12; Chihuahua, 3.996; Baja California Sur, 0.999, y Jalisco 0.051 kilogramos.

Respecto a los detenidos, la Sedena cuenta con un registro de 31 mil 445 del 2019 al 2023, siendo -de igual manera- Sonora y Baja California los estados con mayores capturas, pues sólo estas entidades representan ocho mil 254 detenciones, el 26.2 por ciento del total.

En opinión del director del Observatorio Nacional Ciudadano (ONC), Francisco Rivas, el fentanilo es de las drogas que más ha crecido en términos de distribución y, por ello, a pesar de los esfuerzos de las autoridades para combatirla, no son suficientes, puesto que persiste la impunidad en el país.

“Sabemos que hay cocinas en México donde se produce fentanilo. Hay puertos en donde ingresa impunemente, hay redes de tráfico que no sólo llegan a Estados Unidos, sino que invaden México. Uno de los elementos que estamos estudiando es cómo los menores o adolescentes están ingresando a ese mercado de drogas más baratas con su dinero y por ello analizamos los programas sociales también”, explicó.

Dijo que es necesaria una estrategia que ataque los recursos de los grupos delictivos y analizar las redes de corrupción, ya que de nada sirve que se decomisen toneladas de la droga, si no se pueden desmantelar las estructuras criminales.

“Por eso los criminales hacen lo que hacen. Las acciones para combatirlas no se hacen porque las autoridades los dejan actuar en los territorios; eso es corrupción e impunidad”, indicó.

Rivas aseguró que lo primordial es que el Gobierno federal reconozca el problema del fentanilo y su incapacidad para combatirlo, para que de ahí se tenga una estrategia que ataque las armas y el dinero, pues aclaró que Estados Unidos y China saben que se trafica fentanilo desde sus territorios, pero “se echan la bolita” en el combate.

Luis Carlos Sánchez, investigador de Causa en Común, señaló que ningún gobierno tiene la capacidad de analizar el alcance del consumo, venta y distribución de la droga, pues si bien hay operativos para decomisar fentanilo, no se sabe si es una gran incautación o sólo una pequeña parte.

“Como cualquier empresa, necesitas una demanda y hay crisis porque hay consumo de una parte de la población, por ello no es sorpresa que los decomisos sean en el norte, que es territorio del Cártel de Sinaloa; entonces, ya sabes en dónde está el problema, ahora se debe combatir para que no siga pasando”, expuso.

David Saucedo, experto en seguridad, detalló que hay un fuerte problema en México por el fentanilo, situación que se ha ido saliendo de control, por lo que consideró que ya puede ser una batalla perdida para las autoridades mexicanas, debido a que los grupos delictivos se mueven muy rápido en sus formas de producción y distribución.

“El problema ahora está en los puertos, que es en donde entran todos los precursores que forman el fentanilo; por ello, es ahí donde se debe iniciar el combate, si es que se quiere hacerlo. El Estado no ha tenido el control total del territorio, y a eso se le suma el avance de los cárteles de Jalisco y Sinaloa, que todavía es peor”, dijo.

Sin embargo, Federico Ponce Rojas, consultor en temas de seguridad, aseveró que la inteligencia del Gobierno federal debe ser la base para atacar a todas esas sustancias que contaminan al país, así como a los criminales que las producen, ya que es un problema de salud pública.

“En vez de estar agarrándonos con los legisladores de Estados Unidos, es necesario reconocer el problema y atacarlo, pues luego salen personas como (Hugo López) Gatell, que minimizan el mismo problema”, indicó.