El abogado de los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa, Vidulfo Rosales, aseguró que a pesar de las voces que aseguran que el caso tardará varios años en cerrarse, ellos esperan que no sea así, toda vez que requieren de resultados rápidos, de lo contrario, el caso puede politizarse aún más.

“Es una valoración que yo no puedo validar, porque es subjetiva. Yo espero que ya no se tarde, porque si no, el caso se puede politizar más de lo que ya está. Si bien este Gobierno ha tenido más apertura que el anterior, se ha tardado mucho también, ya qué hay elementos para avanzar en la desaparición de los jóvenes normalistas”, dijo a La Razón.

Ayer, este rotativo publicó una entrevista con Ángela Buitrago, integrante del GIEI, quien señaló que, para que el caso se cierre, pasarán varios años por la cantidad de implicados; por ello, deberá estar abierto hasta que se resuelva.

Rosales dijo que no se puede conocer el tiempo, “ya que sí, hay muchos actores involucrados que podrían hacer más larga la investigación. Sí hay muchos involucrados y se politizó. Se puede tardar, pero esperemos que no llegue hasta años, porque urge que se conozca el paradero de los estudiantes.

“Esperamos que este año sea el definitivo, ya que no podemos esperar más. Son lamentables las declaraciones de Buitrago pero ella es la experta y no queremos que se vaya hasta 2021, queremos que se resuelva antes de terminar 2020. De lo que conocemos de la investigación diferimos mucho de esa posición, porque creemos que no se puede todavía establecer una narrativa, ya que no hay elementos de convicción sólida para poder arribar a una hipótesis, a una narrativa, ya que creemos que se debe continuar la investigación”, subrayó.

Sobre las afirmaciones de la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, de que las nuevas investigaciones por el caso “arrojan luces sobre lo verdaderamente ocurrido” y que harán todo lo posible para llevar a los responsables ante la justicia, Rosales dijo que no se puede salir de una conclusión denominada “verdad” a querer esgrimir otra, pues no tendría sentido.

“Lo que le hemos pedido al Presidente es no establecer narrativas y trabajar en el esclarecimiento de los hechos. No puedo decir si las declaraciones de Sánchez Cordero son incorrectas o no, pues en lo que nosotros conocemos de la investigación no hay elementos para decir que ya se tiene establecido lo que ocurrió; hay datos de convicción, datos de prueba que indican algunas circunstancias o cómo sucedieron las cosas, pero todavía no son sólidas, y se están encontrando restos, pero hay huecos en la información en cuanto a circunstancias de tiempo, modo y lugar de cómo sucedieron esos hechos”, precisó.

HACEN PINTAS

 La tarde de ayer, padres de los desaparecidos y estudiantes de la Normal Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, Guerrero, realizaron un mitin en el Consejo de la Judicatura Federal (CJF) en la Ciudad de México para exigir castigo a los jueces que a lo largo de los años han dejado en libertad a presuntos responsables del caso.

Al término de la protesta, y pese a las peticiones de los padres de no hacerlo, un grupo de estudiantes sacó de los camiones en los que llegaron, una caja de aerosoles y comenzaron a pintar las paredes y vidrios del inmueble. Además, rompieron parte de la estructura de la reja que da a Insurgentes Sur.