Mano con mano... piedra por piedra

Como ocurrió en el sismo del 19 de septiembre de 1985, los capitalinos se unieron ayer para ayudar a los que fueron afectados por el movimiento telúrico. Rescatistas y sociedad civil se unieron para acudir a los edificios colapsados para quitar con las manos los escombros en busca de personas que estuvieran atrapadas.

La población se organizó para crear cadenas humanas a fin de retirar pedazos de concreto; mientras elementos del Ejército mexicano salieron a las calles para apoyar a los civiles. Los rescatistas realizaron labores en los edificios que se vinieron abajo; en ocasiones pedían a las personas que guardaran silencio para tratar de escuchar si alguien gritaba debajo de las piedras.

Al caer la noche, autoridades y ciudadanos continuaban las acciones de rescate en las construcciones colapsadas además de que se instalaron centros de acopio, en los que se pedían lámparas de manos, pilas y artículos de limpieza.

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