Marchan maestros y padres de los 43 de Ayotzinapa contra represión a normalistas

Maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y padres de los 43 estudiantes de Ayotzinapa marcharon este miércoles del Ángel de la Independencia hacia el zócalo capitalino, para exigir un alto a la represión de normalistas y pedir al Presidente López Obrador reinstalar la mesa de negociación.

En el acto también demandaron la liberación de los 19 normalistas de Mactumactzá, en Chiapas, quienes al mediodía salieron del penal de El Amate, donde se encontraban desde hace una semana tras ser detenidos por bloquear la caseta de la autopista de Tuxtla Gutiérrez a San Cristóbal de las Casas.

Durante la caminata hacia el centro de la capital mexicana sobre Paseo de la Reforma, avenida Juárez y 5 de Mayo, los manifestantes condenaron también la agresión que sufrieron alumnas de la Escuela Normal Rural "Carmen Serdán", de Teteles, Puebla, y exigir un alto a la represión contra los estudiantes.

Los maestros reiteraron su llamado al Presidente Andrés Manuel López Obrador para abrir una mesa de diálogo junto con la Secretaría de Educación Pública (SEP), para dar respuestas concretas a sus demandas como garantías de seguridad para el regreso a clases presenciales y la nueva Ley General de Educación.

Eloy López Hernández, líder de la sección 22 de Oaxaca, dijo que la CNTE "repudia todo acto de represión, en particular contra los alumnos normalistas”, e insistió en la convocatoria a López Obrador para resolver los problemas magisteriales.

Por su parte, miembros de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (FECSM) rechazaron los "actos de represión" contra los normalistas de Mactumactzá y de Teteles.

Advirtieron que "es momento de organizarnos y levantar la voz contra estas acciones en contra del normalismo rural, porque el objetivo es desaparecernos".

A su paso por el antimonumento a los 43, en el cruce de Bucareli y Reforma, los integrantes de organizaciones sindicales y sociales realizaron el conteo de cada uno de los estudiantes desaparecidos en Iguala, Guerrero, en septiembre de 2014.

Al término de enunciar a cada uno de los desaparecidos alzaron para voz para exigir "justicia" porque "vivos se los llevaron, vivos los queremos".