Especialistas dicen que el fenómeno impacta la salud

Alta población favorece las islas de calor urbano

Explican que el evento se da cuando las temperaturas de la superficie y el aire son más altas en áreas citadinas; señalan que oeste y norte de la ZMVM son las zonas más calientes

Las islas de calor se dan en las zonas urbanas.
Las islas de calor se dan en las zonas urbanas.UNSPLASH.
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Las islas de calor urbano (ICU) representan uno de los cambios en el clima del planeta más significativos inducidos por el ser humano y tienen impacto en la vida de los residentes de las ciudades -quienes representan más de la mitad de la población mundial- en cuanto a salud, bienestar y consumo de energía, coincidieron especialistas.

Jorge Méndez Astudillo, académico del área de Economía Matemática y Modelos Computacionales de la UNAM dijo que “las personas expuestas a intensidades mayores de ICU padecen efectos en la salud por la vulnerabilidad climática; en la economía, como mayor consumo de energía; y en la sociedad, trabajo al aire libre, por ejemplo”.

Argumentó que las variables ambientales y físicas definen la distribución especial de la isla en la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM); la que más se correlaciona es la cantidad de aerosoles, los cuales se diluyen con altitudes elevadas de  bido a la capa límite de la atmósfera.

Ante ello, consideró que el oeste y el norte de dicha área son las zonas más calientes; y las de menor calor se encuentran al sur y al este.

“Como sabemos, el verdor disminuye las ICU y existe mayor cantidad de aerosoles donde hay más población; sin embargo, la zona verde es donde asciende la marginación, por lo que esta última y la privación económica tienen que ser atendidas en programas de mitigación de las islas de calor urbano”, refirió.

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Las islas de calor urbano son un fenómeno común en el que las temperaturas de la superficie y el aire son más altas en las áreas citadinas que en las rurales circundantes, explicó la académica de la Universidad Veracruzana e integrante del grupo de investigación de Ernesto dos Santos Caetano Neto, del Instituto de Geografía de la UNAM, Karla Pereyra Castro.

Pueden formarse bajo una variedad de condiciones, incluso durante el día o la noche en ciudades pequeñas o grandes, en áreas suburbanas, en cualquier estación

Jorge Méndez Astudillo, académico del área de Economía Matemática y Modelos Computacionales de la UNAM

Han ido al alza, ejemplificó, debido a que en 1950 aproximadamente 30 por ciento de la población mundial vivía en ciudades y para 2020 se contabilizó casi 80 por ciento; y se espera que ese porcentaje se incremente.

De acuerdo con Mónica Santillán Vera, del Posgrado en Ciencias de la Sostenibilidad de la UNAM, existe gran desigualdad de carbono entre niveles de ingresos: el decil (uno de los nueve valores que dividen en diez partes iguales un grupo de datos ordenados, en este caso socioeconómico) de más bajos ingresos emite 2.7 por ciento del total de las emisiones de CO2e; mientras que el decil de más altos ingresos, 26.8 por ciento.

Se identifican tres necesidades como indicadores de las emisiones: transporte, 39.9 por ciento; energía para la vivienda, 26.9 por ciento; y alimentos, 15.2 por ciento. La participación del transporte es superior cuando los hogares se ubican en deciles de mayores ingresos

Jorge Méndez Astudillo, académico del área de Economía Matemática y Modelos Computacionales de la UNAM