Política migratoria, regresiva y con excesos: extitular del INM

El excomisionado Nacional de Migración, Tonatiuh Guillén López, aseguró que la política migratoria en México es regresiva y con excesos, contrario a lo que prometió el Presidente Andrés Manuel López Obrador al inicio de su gestión.

“El Gobierno de López Obrador desde la campaña y al inicio hizo una propuesta de no hacer lo que se está haciendo ahorita, entonces más allá de correcciones, los excesos son muy cuestionables porque son comportamientos que ameritan sanciones a servidores públicos. Además hay una regresión en la política migratoria que el propio Presidente dijo no impulsar desde su campaña”, dijo.

En entrevista con La Razón añadió que en términos discursivos puede haber muchas buenas intenciones, pero en términos prácticos hay una política de contención agresiva para grupos vulnerables y un mecanismo de contención ineficaz.

“Lo que tenemos es lo que es y no hay de otra. El punto central es que el Gobierno intentó un giro en la política migratoria y en el que estamos es un regreso al punto donde estaba, pero todavía más agresivo e institucionalmente duro por el rol de la Guardia Nacional”, expresó.

El ahora profesor del Programa Universitario de Estudios de Desarrollo de la UNAM, dijo que México necesita avanzar hacia un escenario de reivindicación y protección de derechos humanos de las personas, así como de nuevas maneras de atender la política, lo que supone un diálogo con Estados Unidos para avanzar a un acuerdo sobre migración, refugio y desarrollo que involucre a Canadá, Estados Unidos y México.

Otra medida en términos operativos, que requiere de mucha voluntad política, es que los procesos de refugio inicien en Centroamérica y que sean protocolos que eviten toda la incertidumbre en la que se encuentran las personas, así como evitar que los migrantes sean coptados por el crimen organizado.

“Una clara identificación de los casos más extremos permitiría que las personas transiten sin ninguna restricción por Centroamérica y/o por México, y que pudieran subir todavía hasta Estados Unidos o Canadá, lo que evitaría la presencia de traficantes en todo el trayecto; alternativas como éstas son las que necesitamos”, dijo.

Respecto a la situación que atraviesa la frontera sur de México, aclaró que el principal problema es la persistencia de situaciones de crisis en los países de origen, en particular se ha agravado en Haití, lo que explica en buena parte el flujo que viene llegando.

Además añadió que comienzan a llegar más personas de Cuba, Brasil y Venezuela: “vimos el fin de semana pasado la desarticulación de manera muy agresiva de una caravana migrante de haitianos en Chiapas por parte de elementos de la Guardia Nacional, lo que se traduce en un endurecimiento de la política migratoria, que es muy marcada en términos de impedir el paso de las mismas caravanas”.

El exfuncionario federal comentó que el flujo de los últimos cuatro meses ha sido el más alto de la historia, ya que simplemente el pasado mes de julio, en Estados Unidos detuvieron 212 mil personas, lo que demuestra el alza en la movilidad humana.

“Hay otro flujo, que es el que tiene dinero para pagar a los grupos organizados y está muy campante, ya que tiene una logística operativa impresionante, ya que implica que se muevan cuatro mil personas por día atravesando en todo el país”, precisó.

Respecto al aumento de solicitudes de refugio de ciudadanos de Chile en México, aseguró que se debe a que vienen acompañando a sus padres de Haití, ya que nacieron en ese país de Sudamérica y no tienen más remedio que salir con ellos.

“Incluso, también hay muchos brasileños que son hijos de haitianos, pero la migración de Haití prácticamente le dio la vuelta a todo el continente”, dijo.