Voceros de los 43 rechazan tener infiltrados del crimen en protestas

Voceros de la Escuela Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa, Guerrero, rechazaron que su movimiento esté siendo infiltrado por grupos criminales, ya que su único objetivo, señalaron, es exigir la presentación con vida de los 43 estudiantes desaparecidos en Iguala en 2014.

En entrevista con La Razón, Miguel “N”, vocero y estudiante de la Normal, dijo que, con o sin el permiso del Gobierno, seguirán realizando protestas y movilizaciones, debido a que apenas dejan las manifestaciones, las autoridades “se cruzan de brazos”.

“Con o sin el permiso de Andrés Manuel López Obrador, seguiremos haciendo protestas y manifestaciones, ya que no quiere decir que dejemos de hacerlo sólo porque lo diga él, ya que las demandas siguen hasta hallar a los 43”, explicó.

El vocero mencionó que es totalmente falso que estén siendo infiltrados y expuso que su única consigna es y ha sido pedir la localización de los 43 estudiantes.

“Ahorita estamos esperando reunirnos junto con los papás para revisar las siguientes acciones a seguir, ya que no podemos seguir, hasta hablar con ellos, de las declaraciones del Presidente y siguientes movilizaciones”, dijo a este diario.

Por separado, Hilda Legideño, madre de José Antonio Tizapa Legideño, uno de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos, aseguró que no tienen conocimiento que dentro de la Escuela Rural Isidro Burgos o el movimiento que acompañan los estudiantes como forma de protesta, haya criminales infiltrados, porque el alumnado los ha acompañado desde el inicio de sus manifestaciones, dijo, de manera solidaria.

“Las que están infiltradas son las mismas autoridades, pero la realidad es que la delincuencia, como tal, no está o no lo hemos visto. No está bien que las autoridades ataquen al movimiento, cuando ellos nos están ayudando a hacer visibles nuestras demandas. No entiendo por qué nos están atacando de esa manera, si los estudiantes y nosotros hemos caminado juntos desde el inicio”, detalló.

Hilda Legideño aseguró que las protestas deben seguir, ya que la única manera que les ha abierto las puertas para que las autoridades federales y estatales les hagan caso es precisamente protestar en casetas y otros lugares.

“Es la única forma en que nos hacen caso, porque apenas dejamos de hacerlo, se olvidan del tema, y por ello es necesario seguir con las labores informativas de la escuela y de la aparición de los 43”, comentó.

Por separado, Cristina Bautista Salvador, madre de Benjamín Ascensio Bautista, desaparecido en el 2014, dijo a este diario que hasta el momento no han tenido conocimiento de ningún acto delictivo de los estudiantes de la Normal Rural, y que los hechos del viernes pasado fueron por una agresión de los agentes de la Guardia Nacional.

Además, coincidió en que la única manera de visibilizar su lucha es yendo a volantear a casetas y carreteras, porque es la mejor forma en que la gente puede dar informes del paradero de los jóvenes, a falta de respuesta de las autoridades.

“Ellos fueron agredidos por la Guardia Nacional cuando ya se iban, por eso fue el enfrentamiento, pero nosotros, desde el inicio, no hemos tenido ningún problema con ellos, por eso desconocemos si hay o no alguna persona infiltrada. Sólo puedo decir que nos han ayudado mucho a visibilizar la lucha”, comentó.

Sobre la decisión de las autoridades federales de ya no permitir que se tomen más casetas, dijo que éstas no pueden hacerlo, ya que “nunca se sabe cuándo una persona sabrá y te dirá algo nuevo, por eso lo hacemos; el Gobierno no puede seguir reprimiendo a los estudiantes que vienen de violencia”, dijo.

Llama CNDH a que se instale mesa de diálogo

La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) hizo un llamado para que autoridades estatales en Guerrero, del Gobierno federal, estudiantes de la Normal Rural Isidro Burgos y padres de los 43 de Ayotzinapa instalen una mesa de diálogo, a efecto de privilegiar la generación de acuerdos que coadyuven en la construcción de un ambiente de paz, respeto y protección a los derechos humanos.

A través de un comunicado, el órgano autónomo detalló que el objetivo es que se priorice la seguridad de las personas que transitan por el estado y de quienes protestan, luego de los incidentes del pasado 4 de febrero, en los que estudiantes normalistas se enfrentaron con agentes de la Guardia Nacional en la caseta de Palo Blanco.

Además, la CNDH comentó que es urgente solucionar de fondo los problemas que aquejan a la Normal Rural desde años atrás y que son parte de las manifestaciones, como la investigación por la desaparición de los 43 estudiantes en septiembre de 2014, aparte de hacer caso a las líneas de análisis que los padres han señalado.

Otra de las peticiones del alumnado es atender las necesidades académicas y materiales de las Escuelas Normales Rurales que se encuentran en diferentes entidades federativas, con el propósito de prevenir hechos que pongan en riesgo la protección y el ejercicio de los derechos humanos de las personas.

Por esta razón, la CNDH aseguró que está lista para coadyuvar a que se lleve a cabo el diálogo con las autoridades estatales y federales.