Afectados por la estafa en criptomonedas denunciaron al presidente argentino, Javier Milei, por asociación ilícita y fraude, al promover una inversión que detonó pérdidas de cuatro mil millones de dólares en plena recuperación económica.
A dos días de que el libertario impulsara el proyecto “Viva la Libertad” en X e Instagram bajo la consigna “el mundo quiere invertir en Argentina” e invitar a adquirir la moneda virtual “$LIBRA”, el abogado del Observatorio del Derecho a la Ciudad, Jonatan Baldiviezo, presentó la primera medida legal en su contra.
Las víctimas sostienen que el Ejecutivo federal fue partícipe “premeditado” de la “megaestafa más grande de la historia”, por la divisa, pues fue el ancla de atracción, lo que dejó sin ahorros a 40 mil ciudadanos que siguieron su recomendación al creer en su confiabilidad, pues la propuesta vino del máximo cargo en el país, no de cualquier persona o empresario. Y es que su mensaje multiplicó la llamada “$LIBRA”, que pasó de 0.000001 dólares a 5.20 por unidad, y cuyo nombre se asoció a su partido Libertad Avanza.
- El Dato: Su homólogo colombiano, Gustavo Petro, se burló de lo hecho por Milei y le recomen- dó mejor invertir en café al ironizar que ése también “se vende por libras”
Sin embargo, los desarrolladores se retiraron abruptamente con las ganancias, dejando en ceros a los argentinos que se unieron al “VivaLaLibertadProyect” en busca de dividendos y apoyar emprendimientos locales, pero el llamado token quedó en ceros, lo que refleja el riesgo de una moneda digital sin control.
Según la acusación, Milei es uno de los responsables de esta farsa por empujar a la población a invertir, aunque borró la publicación al supuestamente descubrir el engaño, pues en otro mensaje reconoció el error, pues no conocía los pormenores del plan y al ver el impacto optó por corregir y hasta lanzarse contra críticos a quienes tachó de “ratas inmundas” por aprovechar su fallo para atacarlo.
Y agregan, en la acción ciudadana, que al tratarse del jefe de Estado deben investigarse delitos como “incumplimiento de deberes de funcionarios públicos” y violación a la Ley de Ética Público, por lo que exigieron medidas cautelares inmediatas, desde el bloqueo de cuentas bancarias y virtuales de los involucrados y el allanamiento de la Quinta de Olivos o la residencia oficial para recuperar los dispositivos con los que se promocionó la criptomoneda que llevó a la quiebra a miles, pues otros políticos replicaron el polémico mensaje del líder de la Casa Rosada como Martín Menem, presidente de la Cámara de Diputados. Asimismo, se solicitó intervenir la cuenta de X del presidente para rastrear los contactos en esta acción “concertada” o determinar si recibió alguna ganancia por ello.
- 3.4 mil veces se compartió su mensaje en X, según Internet Archive
Y la prensa anticipa un aluvión de acciones legales en su contra y fuentes de El Día revelaron que hasta anoche suman 112 denuncias ante la Justicia.
Pero el Gobierno lo deslindó de supuestos delitos al referir en una amplia publicación que Javier Milei no fue parte de “ninguna instancia del desarrollo de la criptomoneda” y actuó rápidamente, aunque el daño estaba hecho, pues hasta el presunto proveedor de la infraestructura, Haydeen Mark Davis, lo acusó de detonar la caída de “$LIBRA” al “traicionar” al pueblo y eliminar el post, pues ello causó un “impacto catastrófico”, según un video que publicó el diario Clarín.
Y la oficina presidencial abundó que éste desconocía de qué se trataba el emprendimiento, aunque sí tuvo un acercamiento al reunirse con los representantes de KIP Protocol, Mauricio Novelli y Julian Peh, y hasta con Davis, quien se presentaba como supuesto asesor.

Y para enfatizar que no hubo nexo con el engaño, se ordenó a la Oficina Anticorrupción, a su cargo, indagar si hubo “conducta impropia” de él o el gabinete.
En tanto, la oposición, como Unión por la Libertad, busca acciones firmes contra él al promover un juicio político al ser un acto grave y recalcar que debía conocer sus limitantes, pues la ley prohíbe a personas en el poder “promover producto, servicio o empresa”, pero lo hizo aprovechando su influencia, mientras que aliados lo defendieron al acusar a los adversarios de politizar el tema.

