Autoridades buscan al responsable del ataque con bombas molotov a un centro de servicio de Tesla en Las Vegas, que provocó un incendio en el que fueron consumidos cinco automóviles eléctricos de la empresa de Elon Musk, un hecho que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha considerado “terrorismo doméstico”.
De acuerdo con el Departamento de Policía Metropolitana de Las Vegas, la madrugada de este martes 18 de marzo un individuo vestido de negro irrumpió en las instalaciones de Tesla y lanzó “artefactos” para incendiar varios automóviles.
En un comunicado, la policía indicó que al menos cinco vehículos resultaron dañados, y al menos dos de ellos fueron consumidos por completo por las llamas; además, en las puertas del negocio y en varios autos se encontró pintada, con aerosol rojo, la palabra “resistir”.
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Posteriormente, en conferencia de prensa, el asistente del sheriff, Dori Koren, calificó el suceso como un “ataque dirigido”, aunque sostuvo que, por el momento, se considera un hecho aislado; no obstante, las investigaciones siguen en curso con la participación del FBI.
FBI ve motivación política en ataque a Teslas
Al respecto, el agente especial del FBI, Spencer Evans, señaló que, si bien era prematuro catalogar el ataque como terrorismo, los elementos encontrados apuntaban a una posible motivación política.
Además de los vehículos incendiados, los investigadores hallaron un artefacto incendiario sin detonar dentro de otro automóvil y, según la policía, el sospechoso —cuya identidad se desconoce y permanece prófugo— habría disparado en al menos tres ocasiones contra los vehículos.
A través de la red social X, el CEO de Tesla, Elon Musk, calificó los hechos como “una locura” y afirmó que su empresa “solo fabrica autos eléctricos y no ha hecho nada para merecer estos atroces ataques”.
Trump defiende a Elon Musk tras ataques
Cabe destacar que Tesla ha estado en el centro de la discusión política debido a las acciones de Elon Musk al frente del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) para recortar el gasto federal, que ha provocado despidos masivos del personal federal.
Al respecto, el presidente estadounidense, Donald Trump, defendió a Musk, a quien considera “un gran patriota”, y sugirió que quienes atenten contra Tesla deberían ser considerados “terroristas domésticos”.
“Cuando se perjudica a una empresa estadounidense como esta, que genera tantos empleos, hay que actuar”, declaró desde la Casa Blanca.
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cehr
