Tensión aumenta en Cachemira

India lanza drones de ataque sobre Pakistán

Casi cuatro decenas de muertos, acusaciones cruzadas y bombardeos aéreos, marcan una nueva escalada; sube la tensión entre las dos potencias con armamento nuclear

Un niño de una aldea cachemir camina dentro de una casa dañada por el bombardeo de artillería paquistaní, en la Cachemira india, ayer.
Un niño de una aldea cachemir camina dentro de una casa dañada por el bombardeo de artillería paquistaní, en la Cachemira india, ayer. Foto|AP

La escalada entre India y Pakistán alcanzó un nuevo punto crítico, ayer, tras una serie de ataques cruzados con drones y misiles que dejaron al menos 40 personas muertas en ambos lados de la frontera, en el peor enfrentamiento armado entre estos países en más de 20 años. Ambos gobiernos, que poseen armas nucleares, se acusan mutuamente de haber iniciado los ataques, mientras aumenta el temor a una confrontación a gran escala.

La India lanzó varios drones de ataque Harop, de fabricación israelí, contra objetivos estratégicos en Pakistán. Según el ejército paquistaní, 29 de estos aparatos fueron derribados, pero algunos lograron impactar en zonas sensibles. Dos civiles murieron y otro resultó herido tras la caída de restos de un dron en la provincia de Sindh. Además, un dron alcanzó una base militar cerca de Lahore, que hirió a cuatro soldados. Otro cayó en Rawalpindi, en las cercanías de Islamabad.

  • El Dato: India y Pakistán libraron tres guerras desde su independencia, dos de ellas por la región himalaya de Cachemira. Hoy, la sombra de un cuarto conflicto aumenta.

Nueva Delhi afirmó que el objetivo fue neutralizar radares y sistemas de defensa aérea paquistaníes, en respuesta a lo que calificó como intentos de Pakistán por atacar posiciones militares en Jammu, Udhampur y Pathankot, ubicados cerca de la disputada región de Cachemira. El Ministerio de Defensa indio aseguró que estos ataques fueron repelidos sin víctimas, aunque ordenó un apagón nocturno en el distrito fronterizo de Gurdaspur por razones de seguridad.

La ofensiva aérea se produjo un día después de que misiles indios impactaran en territorio paquistaní, que provocaron la muerte de 31 civiles, según Islamabad. India sostiene que dichos ataques fueron represalias por el asesinato de más de dos decenas de turistas hindúes en Cachemira el mes pasado, atentado que atribuye a milicianos con apoyo pakistaní, algo que Islamabad niega categóricamente.

Ambos bandos también intercambiaron intensos disparos en la Línea de Control, la frontera de facto en la región de Cachemira. Pakistán asegura haber causado la muerte de entre 40 y 50 soldados indios durante estos enfrentamientos, mientras que India no ha confirmado ninguna baja. El Ministerio de Asuntos Exteriores indio, por su parte, denunció la muerte de 16 civiles en ataques pakistaníes, entre ellos tres fieles sij en un templo.

Los efectos de los combates también se han sentido entre la población civil. Miles de personas han sido evacuadas en ambos lados de la frontera. En la Cachemira paquistaní, unas 2 mil personas abandonaron sus hogares. En el lado indio, decenas de miles durmieron en refugios habilitados por el gobierno.

En las ciudades de Jammu y Srinagar se escucharon explosiones y se reportaron apagones tras ataques con drones y misiles que, según India, fueron repelidos. Mientras tanto, las imágenes de proyectiles iluminando el cielo se replicaron también en Jaisalmer, cerca de la frontera con Sindh.

El gobierno paquistaní ha negado todas las acusaciones de haber lanzado ataques en territorio indio, calificándolas de “infundadas y motivadas políticamente”.

El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, intervino diplomáticamente, ayer, manteniendo conversaciones con altos funcionarios de ambos países para instarlos a una desescalada inmediata. Sin embargo, los hechos sobre el terreno y la retórica encendida de ambos lados reflejan un panorama cada vez más volátil.