Activistas serán deportados

Exigen a Israel liberar a Flotilla que iba a Gaza a entregar ayuda

Interceptan embarcación en aguas internacionales; parte convoy terrestre desde Túnez, desafían bloqueo fronterizo; 14 palestinos mueren en Rafah en un tiroteo por comida

El navío de ayuda humanitaria Madleen es escoltado por fuerzas navales del Kremlin, se dirigía al puerto de Asdod, tras ser capturado, ayer.
El navío de ayuda humanitaria Madleen es escoltado por fuerzas navales del Kremlin, se dirigía al puerto de Asdod, tras ser capturado, ayer. Foto›AP

El buque británico Madleen, que transportaba ayuda humanitaria con destino a Gaza, fue interceptado por fuerzas israelíes durante la madrugada de ayer mientras navegaba en aguas internacionales a 120 millas de la costa, cerca de Alejandría. La embarcación, parte de la llamada Flotilla de la Libertad, fue abordada por las fuerzas especiales Shayetet 13 tras desoír varias advertencias israelíes. Según el Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel, la operación se realizó sin uso de fuerza y los tripulantes resultaron ilesos.

A bordo de la embarcación viajaban 12 activistas de distintas nacionalidades, incluidos la activista climática Greta Thunberg y la eurodiputada francesa Rima Hassan. Los pasajeros fueron trasladados al puerto israelí de Asdod, y se prevé su deportación. El grupo Adalah, encargado de la defensa legal de los activistas, afirmó que Israel no tiene autoridad legal para detener el barco ni apoderarse de la carga, ya que se encontraba fuera de sus aguas territoriales y se dirigía al Estado de Palestina.

  • El Dato. La comunidad internacional ha condenado el uso de la ayuda como herramienta de presión y urge al levantamiento inmediato del bloqueo y la protección de los civiles.

Organizadores de la flotilla, como el Comité Internacional Rompamos el Bloqueo de Gaza, denunciaron el operativo como una violación del Derecho Internacional y acusan a Israel de ignorar las decisiones de la Corte Internacional de Justicia, que exige acceso humanitario a Gaza. El barco llevaba alimentos, leche para bebés y suministros médicos. Sin embargo, las autoridades israelíes minimizaron el gesto, lo calificaron como un “truco de relaciones públicas” y afirmaron que el cargamento equivaldría a menos que un camión con ayuda.

CARAVANA SALE DE ÁFRICA. Mientras tanto, un convoy de autobuses y vehículos privados partió desde Túnez rumbo a Gaza con el objetivo de exigir el fin del cerco humanitario. La iniciativa está compuesta por activistas, juristas y profesionales de la salud del norte de África, y planea cruzar Libia y Egipto hasta llegar al paso de Rafah. Aunque no esperan acceder a Gaza, buscan enviar un mensaje de solidaridad a los 2 millones de palestinos atrapados en la franja.

“Este convoy se dirige directamente a nuestra gente en Gaza y les dice: ‘No están solos’”, escribió Yahia Sarri, organizador argelino. A su paso por Túnez y Argelia, la caravana fue recibida con manifestaciones de apoyo, ondeo de banderas palestinas y consignas contra el asedio. El grupo lamenta la falta de presión de los gobiernos árabes para detener el conflicto que ya lleva 20 meses.

54,900 palestinos han muerto desde el 7 de octubre de 2023

Las rutas hacia Gaza están plagadas de peligros. La entrada a Libia se ha complicado por los recientes enfrentamientos entre milicias rivales, y el cruce de Rafah permanece cerrado desde que el ejército israelí tomó el control del paso en mayo de 2024. No obstante, los activistas están decididos a completar su recorrido hasta Gaza.

LOS MATAN POR ALIMENTOS. La madrugada de ayer, al menos 14 palestinos murieron y más de 99 resultaron heridos tras un tiroteo cerca de un centro de distribución de ayuda respaldado por Israel y EU en Rafah. Según testigos, los disparos provinieron de una milicia local aliada con el ejército israelí. Este episodio se suma a una serie de ataques similares desde la instauración del nuevo sistema de distribución de ayuda, implementado para evadir a Hamas pero rechazado por la ONU.

Ante estos hechos, Hamas emitió un comunicado exigiendo el cese inmediato de las actividades de la GHF, a la que acusó de colaborar con el ejército israelí y convertir los centros de ayuda en “trampas mortales”.