El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, anunció ayer una nueva iniciativa militar bautizada como “Centinela oriental”, con la que se busca reforzar la defensa del flanco oriental de la Alianza tras la invasión del espacio aéreo polaco por parte de drones rusos el miércoles. De forma paralela, Rusia y Bielorrusia lanzaron un ejercicio militar conjunto planificado desde hace tiempo y que ha generado preocupación en Occidente.
Rutte detalló que esta nueva actividad comenzará “en los próximos días” e implicará una gama de activos de países aliados como Dinamarca, Francia, Reino Unido, Alemania y “otros”.
“Además de capacidades militares más tradicionales, este esfuerzo también incluirá elementos diseñados para abordar los desafíos particulares asociados con el uso de drones (…) y dejará claro que como alianza defensiva, siempre estamos preparados para defender”, añadió.
En tanto, Rusia y Bielorrusia lanzaron el viernes el ejercicio militar “Zapad 2025” u “Oeste 2025”, que durarán hasta el martes y pretenden mostrar los estrechos lazos de defensa entre Moscú y Minsk. En Moscú, el Ministerio de Defensa aclaró que partes del ejercicio se llevarán a cabo en territorio ruso, así como en los mares Báltico y de Barents.