El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, elevó ayer la presión sobre Hamas al advertir que tiene “tres o cuatro días” para responder al plan de paz diseñado en Washington y presentado el lunes en la Casa Blanca. La iniciativa, que busca detener la guerra en Gaza tras dos años de ofensiva israelí, fue anunciada junto al primer ministro israelí Benjamín Netanyahu, quien dio su respaldo público.
“Hamas lo hará o no lo hará, y si no lo hace, será un final triste”, declaró Trump ante periodistas. Con esa frase, dejó claro que la negativa del grupo palestino implicaría el apoyo total de su gobierno a una intensificación de la operación militar israelí.
La advertencia llega en un momento en que la Franja de Gaza vive una de las peores crisis humanitarias de su historia, con más de 66 mil muertos, de acuerdo con cifras locales, cientos de miles de desplazados y un territorio sometido a un bloqueo casi total.
- El Dato: Benjamín Netanyahu amenazó con que Israel “finalizará el trabajo” en la Franja de Gaza si Hamas responde de forma negativa al plan de paz, presentado el lunes.
El documento elaborado por la administración estadounidense se articula en 20 puntos que pretenden sentar las bases de una salida política. Entre ellas destaca un alto al fuego inmediato, la retirada gradual de las tropas israelíes, la liberación de todos los rehenes en manos de Hamas a cambio de prisioneros palestinos y la entrada de ayuda humanitaria bajo coordinación internacional.
Uno de los elementos más controvertidos es la propuesta de instaurar un gobierno de transición en Gaza, conformado por tecnócratas palestinos y tutelado por una “Junta de la Paz” dirigida por Trump con participación de actores internacionales como el exprimir ministro británico Tony Blair. El plan excluye explícitamente a Hamas de cualquier papel político, aunque ofrece amnistía a sus miembros que renuncien a la violencia y garantías de salida para quienes deseen abandonar el enclave.
El texto incluye, además, una cláusula que abre la posibilidad de negociar la creación de un Estado palestino. Sin embargo, Netanyahu negó haber acordado ese punto con el magnate, a pesar de que figura en la propuesta escrita.
- 75 por ciento de pozos de agua de Gaza están fuera de servicio
- 150 niños han muerto por inanición en Gaza desde 2023
- 450 mil personas han sido desplazadas del norte desde agosto
POSTURAS ENTRE PALESTINOS. Por su parte, Hamas inició consultas internas con sus líderes políticos y militares, tanto en Gaza como en el extranjero. Una fuente del movimiento reconoció que se busca alcanzar un “acuerdo integral” que incluya retirada completa de Israel, levantamiento del bloqueo de 2007 y un mecanismo de reconstrucción.
En tanto, la facción de Fatah, dominante en la Autoridad Palestina en Cisjordania, expresó su disposición a cooperar con iniciativas internacionales, aunque denunció el carácter unilateral del documento. En tanto, Abbas Zaki, uno de sus altos funcionarios, lo calificó de “documento de rendición” que legitimaría la ocupación y fragmentaría la unidad.
A su vez, el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, reiteró su compromiso de celebrar elecciones en un plazo de un año tras el fin de la guerra, pero también advirtió que aceptar la propuesta sin modificaciones consolidaría un escenario de humillación.
En el frente diplomático, Qatar y Egipto actúan como mediadores principales y confirmaron que el plan fue entregado oficialmente a Hamas. Doha, a través de su canciller Mohamed bin Abdulrahmán al Thani, señaló que “algunos puntos requieren aclaración y negociación”, especialmente en lo relativo a la retirada militar israelí, ya que Netanyahu dijo ayer que el ejército no abandonará Gaza después de que finalice la guerra.
“Lo que Trump ha propuesto es la adopción plena de todas las condiciones israelíes, que no garantizan al pueblo palestino ni a los residentes de la Franja de Gaza ningún derecho legítimo”, dijo a Reuters un funcionario palestino que pidió no ser identificado.
No obstante, analistas académicos como Sultan Barakat, de la Universidad Hamad Bin Khalifa en Qatar, advirtieron que el plan está “sesgado a favor de Israel” y coloca a Hamas en la disyuntiva de renunciar a toda su influencia política sin garantías de representación futura.
Mientras, las fuerzas israelíes avanzaron hacia el centro de la ciudad de Gaza, que Netanyahu describió como el último bastión de Hamas.
Al mismo tiempo, la Flotilla Global Sumud alertó en la madrugada de su entrada en la “zona de alto de riesgo”, punto donde Israel ha interceptado otras embarcaciones pese a ser aguas internacionales, a partir de los 240 kilómetros de las costas del enclave palestino. Tel Aviv anunció que interceptará la misión en las próximas horas y que, ante la imposibilidad de remolcar todas las naves, algunas podrían ser hundidas en alta mar.