Aprueban 800 mil dosis contra la viruela símica

Después de semanas de retrasos, casi 800 mil dosis de la vacuna contra la viruela del mono pronto estarán disponibles para su distribución, dijeron el miércoles los reguladores de salud de Estados Unidos.

El anuncio se produce en medio de crecientes críticas de que las autoridades han sido demasiado lentas en el despliegue de la vacuna, lo que podría perder la ventana para contener lo que pronto podría convertirse en una enfermedad infecciosa arraigada.

Hace casi dos semanas, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) dijo que había terminado las inspecciones necesarias en las instalaciones de Bavarian Nordic en Dinamarca, donde la compañía llena viales de la vacuna.

La FDA dijo a través de Twitter el miércoles que la certificación había sido finalizada. Las dosis ya están en Estados Unidos “para que estén listas para ser distribuidas una vez que se aprueben los cambios de fabricación”, dijo la agencia.

Estados Unidos ya ha enviado más de 310 mil dosis de la vacuna Jynneos a los departamentos de salud estatales y locales. Pero las clínicas en San Francisco, Nueva York y otras ciudades importantes dicen que todavía no tienen suficientes vacunas para satisfacer la demanda.

El jefe del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos dijo el miércoles que los funcionarios anunciarían más asignaciones el jueves.

El virus de la viruela del mono se propaga principalmente a través del contacto piel con piel, pero también puede transmitirse al tocar la ropa de cama utilizada por alguien con la infección. La gran mayoría de los casos reportados han sido en hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, aunque los funcionarios de salud han enfatizado que cualquiera puede contraer el virus.

Las personas con viruela del mono pueden experimentar fiebre, dolores corporales, escalofríos y fatiga. Muchos en el brote han desarrollado protuberancias similares a granos en muchas partes del cuerpo.

La lenta respuesta federal ha generado comparaciones con los primeros días del brote de Covid-19, pero los expertos habían señalado que Estados Unidos tenía una gran ventaja: más de un millón de dosis de vacuna en la reserva nacional estratégica.

Pero resultó que los funcionarios estadounidenses sólo tenían unas dos mil dosis a mano cuando se identificó por primera vez el brote en mayo. Los retrasos en el envío y la regulación han significado que sólo una parte del resto se desplegó.

“No hay suficientes dosis”, dijo el doctor Perry Halkitis de la Universidad de Rutgers. “Creo que, con una acción más rápida por parte del gobierno federal, es posible que no estemos en la situación en la que estamos ahora”.

Las dosis enviadas anteriormente provenían de una instalación separada en Dinamarca que ya tenía la aprobación de la FDA. Otras 786 mil dosis fabricadas en una instalación nórdica bávara recién inaugurada estaban a la espera de la certificación estadounidense anunciada el miércoles.

La FDA requiere inspecciones de todas las plantas de fabricación de vacunas para garantizar la seguridad, la esterilidad y la consistencia de la producción.

Funcionarios estadounidenses anunciaron pedidos este mes de cinco millones de dosis más, aunque no se espera que la mayoría de ellas lleguen hasta el próximo año.

Las autoridades han recomendado que las vacunas se administren a personas que saben o sospechan que estuvieron expuestas a la viruela del mono en las dos semanas anteriores.

La vacuna Jynneos –nombre con el que se ha comercializado– nunca se ha utilizado ampliamente en respuesta a un brote como éste, por lo que el gobierno hará un seguimiento de su funcionamiento.