ONU lanza alerta roja ante daño irreversible en el planeta

Un enorme crecimiento del calentamiento global llevó al planeta a su peor temperatura en dos mil años, por lo que científicos advierten que el daño es irreversible.

Cualquier intento por contrarrestar sus efectos será visible apenas en dos o hasta tres décadas y en menos de 10 años la temperatura podría subir entre 1.5 y 3.3 grados centígrados, superando niveles preindustriales.

El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) sostuvo que ante el momento devastador es inequívoco señalar al ser humano como el único responsable que provocó un futuro más y más caluroso.

La experta climática e integrante del panel, Linda Mearns, refirió que en todos sus análisis, basados en miles de artículos especializados, demostraron que la única garantía es que la situación será cada vez peor, ya que el daño es irreversible hasta por cientos de miles de años.

“No hay ningún lugar al que correr, ningún lugar donde esconderse”, admitió luego de que se explicara que el panorama sólo arroja datos de nuevas olas calurosas, más inundaciones y hasta fenómenos naturales simultáneos en múltiples regiones; es decir, ninguna zona está a salvo, en referencia a países, superficies, atmósfera y océanos; mientras regiones de todas las latitudes enfrentan sequías históricas, los peores incendios e inundaciones mortales, como ocurre en Estados Unidos.

Incluso, se estima que la temperatura provocará niveles de tolerancia crítica tanto para la salud como para la agricultura.

De acuerdo con especialistas, en las últimas décadas el calentamiento se elevó más de un grado, específicamente de 1970 a la fecha, empeorando las condiciones de cualquier otro periodo de 50 años previo. Muestra de ello es el impacto devastador de severos fenómenos naturales.

Al respecto, la copresidenta del grupo de expertos, Valérie Masson-Delmotte, refirió que es muy claro “el papel de la influencia humana”, que provocó cambios abrumadores en unos años.

No obstante, pese a los peligros que se avecinan, resaltó que más allá de generar una alerta se da un panorama del pasado y el futuro de la Tierra para actuar y “entender hacia dónde nos dirigimos, qué se puede hacer y cómo prepararnos”.

Además, los investigadores resumieron en el informe de más de tres mil páginas que se detonará un mayor derretimiento de la capa ártica, que las temporadas de calor serán más extensas y más fuertes, provocando al menos una ola de calor por década cuando antes ocurrían cada 50 años; mientras que las épocas de frío tendrán menor duración, al recordar que el Ártico registra un calentamiento dos veces mayor que otras regiones y habrá severos cambios en la humedad, vientos y formación de nieve, lo que a su vez causará daños en todos los ecosistemas que podrían llevar al mundo a un punto que no conocemos.

Con estos niveles, el planeta alcanzó niveles nunca antes vistos en dos mil años, con lo que los pronósticos del Acuerdo de París, que estimaba un umbral de hasta 1.5 grados, se quedaron cortos, por lo que será necesario redoblar las acciones contra el cambio climático, como lo exigen cientos de activistas en el mundo, principalmente en torno a las emisiones de dióxido de carbono y el uso de combustibles fósiles.

Al respecto, los expertos aseguran que el dióxido de carbono es el principal agente detonador de la crisis, pero hay otros contaminantes dañinos, entre ellos el metano.

En medio de múltiples escenarios, los científicos reiteran que la incertidumbre persistirá por muchos años más y que ésta es una de las últimas oportunidades para lograr un cambio en esta amenaza global.

Por separado, el líder de la Organización de las Naciones Unidas, António Guterres aseveró que el informe demuestra que el mundo enfrenta un “código rojo”, por lo que urgió a todos los gobiernos a no esperar y actuar de manera inmediata para revertir la velocidad del calentamiento.

“Si unimos fuerzas ahora, podemos evitar una catástrofe climática”, expresó previo a la conferencia climática COP26 de noviembre próximo.

Y agregó que es momento de implementar medidas más ambiciosas, no sin antes advertir que cualquier excusa o demora será muy grave para el futuro.

En tanto, expertos reconocen que se podrían exceder sus pronósticos este mismo siglo si no se hay acciones urgentes; mientras que asesores climáticos como Ko Barrett insisten que la buena noticia es que aún se puede hacer algo.