En Caracas
Nicolás Maduro dejó claro que en Venezuela no hay democracia: “Ni con votos ni con balas entrarán más nunca a Miraflores. Ni por las buenas ni por las malas (…) Deben dejarse gobernar por la revolución”, dijo ayer desde el Palacio de Miraflores.
El mandatario aseguró que no se deben crear expectativas con la mesa de diálogo entre el gobierno y la oposición.
“Los procesos de paz que han arrancado bastante bien y ahorita vamos a comentarlos, sobre ese proceso, la necesidad de fortalecerlo y, bueno, decir algunas verdades que hay que decir para que nadie se llame engaños. Que nadie trate de engañar a nadie con las expectativas de un proceso de paz que apenas está empezando”, expresó.
El mandatario aseguró que en la mesa de diálogo llevaron una propuesta para que la Asamblea Nacional acaté la Constitución: “(...)en la mesa de diálogo hemos llevado una propuesta para que la Asamblea Nacional acate como estoy seguro va a acatar muy pronto y empiece a trabajar en una agenda positiva para el país”, expresó.
A las afueras del palacio presidencial, decenas de chavistas se instalaron con tiendas de campaña para impedir que cualquier grupo de oposición que quisiera protestar frente a la sede del Ejecutivo pudiera acercarse. La Mesa de la Unidad Democrática (MUD) ya había cancelado el martes la movilización prevista para Miraflores, sin embargo, el Gobierno convocó a sus simpatizantes a defender la Revolución.
“Yo llegué a las 20:00 horas”, contó David Diez, un joven que vino hasta el campamento desde Guarenas, a las afueras de la capital. Con gorra verde militar y una estrella roja en el centro, Jennifer Mujica, miembro de la Dirección Nacional del partido político de Chávez, llegó a la vigilia cerca de las 22:00 horas. “Seguimos aquí y aquí estaremos”, aseguró.
Del otro lado de la ciudad, jóvenes universitarios gritaban: “¿¡Quiénes somos!? ¡Estudiantes! ¿¡Qué queremos!? ¡Respeto a la Constitución!”, en la marcha que llegó hasta la sede de la Nunciatura Apostólica, en Caracas.
La protesta recorrió calles del este y centro de la capital. Los manifestantes tenían tres peticiones: la liberación de cientos de activistas de oposición que son considerados “presos políticos”, el reabastecimiento de alimentos y medicinas y convocar a elecciones generales.
Agentes policiales, equipados con escudos y equipos antimotines, fueron apostados en los alrededores de la Universidad Central y en calles aledañas al edificio desde que el labora la representación de la Iglesia en Venezuela.
Gobierno reprueba en Derechos Humanos
El Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas planteó ayer 274 recomendaciones que le formularon en el II Examen Periódico Universal de Derechos Humanos (EPU), según el informe preliminar que la instancia internacional emitió hoy.
La delegación encabezada por la canciller Delcy Rodríguez “examinará las siguientes recomendaciones y les dará respuesta a su debido tiempo, pero a más tardar en el 34 período de sesiones del Consejo de Derechos Humanos”, que se celebrará en marzo de 2017.
Ginebra da por hecho que temas sensibles y que salieron a relucir con insistencia en la evaluación, como la escasez de alimentos y medicinas y las peticiones para aceptar ayuda internacional para atacarla; restaurar la independencia del Poder Judicial, el permitir las visitas de los relatores de la ONU y de la CIDH; o liberar presos políticos serán desechadas, tal y como ocurrió hace cinco años.
