Proyectil ucraniano cae en localidad rusa

Foto: Archivo

Una persona murió y dos resultaron heridas de gravedad por un proyectil ucraniano que cayó sobre una localidad rusa en la frontera con Ucrania, informó el domingo el Ministerio del Exterior de Rusia. Sin embargo, Kiev negó haber disparado un misil en territorio ruso.

El comunicado oficial describió el suceso como una "provocación" y advirtió de la posibilidad de "consecuencias irreversibles, de las que es responsable el bando ucraniano".

Rusia afirmó que el proyectil ucraniano cayó el domingo por la mañana en el patio de un edificio residencial en la localidad rusa de Donetsk. La localidad hace frontera con el inestable oriente de Ucrania, donde una insurgencia separatista lleva tres meses de combates con el gobierno de Kiev.

Por su parte, las autoridades ucranianas negaron que un proyectil ucraniano hubiera caído en territorio ruso. Andriy Lysenko, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional y de Defensa, fue citado por la agencia Interfax diciendo que las tropas ucranianas "no disparan en el territorio de un país vecino. No disparan en zonas residenciales".

Lysenko responsabilizó del incidente a los propios rebeldes, y condenó el ataque tachándolo de "provocación".

Moscú ha denunciado en varias ocasiones que las localidades en la porosa frontera con Ucrania —que según Kiev y las potencias occidentales es una ruta de suministro clave para los rebeldes— habrían recibido fuego ucraniano, pero hasta ahora no se habían registrado muertes.

La acusación del domingo se produjo durante el viaje del presidente ruso, Vladimir Putin, cuyo país acogerá el Mundial de fútbol de 2018, para asistir a la final de la Copa del Mundo y participar en la ceremonia de relevo con la presidenta brasileña Dilma Roussef y el presidente de la FIFA, Joseph Blatter.

Las autoridades brasileñas habían dicho el sábado que tanto Putin como su homólogo ucraniano, Petro Poroshenko, asistirían a la final, pero Poroshenko anunció el domingo que no acudiría. Las conversaciones entre Kiev y Moscú sobre un alto el fuego entre los rebeldes y las tropas ucranianas se han estancado en las últimas semanas, mientras las tropas ucranianas expulsan a los insurgentes de importantes localidades en el este del país.