Por Aura Hernández
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El contratar un seguro es un paso muy importante, por lo que debes contar con la asesoría adecuada.
Actualmente existen diversos esquemas de contratación, los cuales van desde una simple llamada telefónica hasta acudir a una sucursal bancaria, sin embargo, la más utilizada es a través de una persona especializada en la materia, es decir, un agente de seguros.
La Comisión Nacional para la Defensa de los Usuarios de las Instituciones Financieras define a un agente de seguros como la persona que actúa de intermediario entre el interesado en adquirir un seguro y la compañía de seguros que lo ofrece.
Éste te brindará asesoría y apoyo no sólo en la contratación sino también durante la vida del seguro y, en caso de alguna eventualidad o siniestro, te brindará las facilidades correspondientes.
Pero antes de decidirte por un seguro y firmar, debes revisar ciertas características de tu agente asegurador, aunque sea un familiar o un amigo, recomienda la Comisión dirigida por Luis Pazos.
Lo primero es revisar que la cédula que lo identifica como agente continúe vigente, con esto tendrás la seguridad de no estar cayendo en un fraude y que dicha persona cuenta con los conocimientos y la preparación suficiente.
Una vez que estés seguro de lo anterior, debe mostrarte distintas alternativas de seguros que cubran tus necesidades, explicarte ampliamente las diferentes opciones con las que cuentas y no dejar lugar a dudas. De hecho, el agente debe aclararte las coberturas incluidas y las exclusiones, las formas de pago y los recargos que aplican, así como su importancia en el costo del seguro. Algo que debes tener muy en cuenta es que jamás debes firmar la solicitud del seguro si ésta se encuentra en blanco, ya que puedes caer en un fraude.
Una vez que te hayas decidido por uno de los seguros, el agente de tiene que entregar la carátula, las condiciones generales, así como el recibo de pago expedido por la aseguradora con el sello correspondiente. En este sentido, el órgano defensor de los consumidores recomienda no aceptar un recibo personal del agente para así evitar problemas posteriores. Una vez cumplido todo lo anterior, puedes descansar tranquilo al saber que estás protegido.
La Comisión consideró que si bien la penetración de los seguros en el país es baja, actualmente la población tiene una mayor conciencia de los riesgos a los que están expuestos y que los seguros representan una alternativa de prevención.
Requisitos de una agente:
1. Ser mayor de edad.
2. En caso de ser extranjero, deberá contar con la documentación que compruebe la calidad migratoria que le permite actuar en el país como agente.
3. No tener alguno de los impedimentos a que se refiere el artículo 13 del Reglamento de Agentes de Seguros y de Fianzas.
4. Haber concluido estudios de preparatoria o equivalentes.
5. Acreditar ante la CNSF que se cuenta con la capacidad técnica para ejercer esta actividad de intermediación.
