En la carrera global por la eficiencia industrial, donde la exactitud se mide en milímetros y la productividad en segundos, México comienza a consolidarse como un jugador clave en la manufactura de precisión; la adopción de tecnologías avanzadas acelera su ascenso.
Tan solo en el primer semestre de 2024, la industria manufacturera representó aproximadamente 19.5% del PIB nacional, colocándose como el sector más grande de la economía. En tanto, en términos de empleo, en el primer trimestre del año pasado, el número de personas ocupadas en las manufacturas alcanzó 9.7 millones de personas, es decir, 16 por ciento de la población ocupada total, esto de acuerdo con cifras del Inegi.
En ese contexto, la manufactura de precisión en el país se coloca con amplio potencial para impulsar su competitividad y elevar la calidad de sus procesos industriales por la aplicación de la tecnología láser, sobre todo en corte y soldadura.
Sectores como el automotriz, aeroespacial y metalmecánico dependen cada vez más de estas tecnologías para mantener su posición en cadenas globales de valor, ya que la ejecución de cortes milimétricos y soldaduras más precisas, se traduce en componentes más confiables, tiempos de producción más cortos y una mayor capacidad para cumplir con especificaciones técnicas internacionales.
“Para Grupo INFRA es prioritaria la innovación para ayudar a las empresas en sus procesos industriales. Por ejemplo, nuestra solución Sparklaser es una línea especializada de gases de asistencia para corte láser, respaldada por asesoría técnica e instalación especializada. Su funcionamiento en la actividad industrial representa una parte crítica del ecosistema tecnológico que sostiene a la manufactura moderna y dentro de ella a la de precisión”, dijo Andrés Cantú, Director de Gases Especiales, Mercancías y Exportaciones de Grupo INFRA.
Por ejemplo, este tipo de tecnologías es clave al momento de fabricar partes críticas para un motor, un fuselaje o una estructura industrial y en esa medida, lograr que las empresas mantengan su posición en cadenas globales de valor.
Aquí es donde entran en juego los gases industriales. Insumos como el nitrógeno, oxígeno y argón -poco visibles cuando se habla de innovación industrial- son indispensables para estabilizar el funcionamiento del láser, proteger las piezas del calor y garantizar acabados libres de imperfecciones.
Por ende, la incorporación de soluciones innovadoras contribuye a capitalizar el potencial industrial del país e impulsar el desarrollo regional. En estados como Querétaro y Nuevo León, la inversión en maquinaria de precisión ha favorecido la productividad manufacturera, que creció 3.4% en 2023. A nivel nacional, este dinamismo también se refleja en la confianza de los inversionistas, ya que tan solo en 2024, la Inversión Extranjera Directa (IED) en industrias manufactureras superó los 19,800 millones de dólares.
Así, hacia una evolución de la manufactura moderna, se eleva el perfil del país en cadenas globales de valor, se fortalece su capacidad para atraer inversión y su efecto multiplicador llega también a la generación de empleos especializados.
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LMCT
