El Gobierno Federal gastó 1.5 por ciento más del presupuesto aprobado para 2024, reveló información acopiada por el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
De acuerdo con la institución, el año pasado se ejercieron 9 billones 205 mil 438.2 millones de pesos, monto equivalente a 27.1 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB); además, el monto es 7.5 por ciento mayor que el ejercido durante 2023, en términos reales.
En noviembre de ese año, el Congreso mexicano, junto con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), entonces a cargo de Rogelio Ramírez de la O, estimaron un gasto de 9 billones 66 mil 45.8 millones de pesos.
“Esta dinámica del gasto pone en riesgo la sostenibilidad de las finanzas públicas y limita la capacidad de atender necesidades sociales clave”, indicó el centro de investigación en su análisis de la Cuenta Pública 2024.
El CIEP lamentó además que el gasto público de 2024 se dio en un contexto de “menor crecimiento económico, alta inflación y menor producción petrolera”.
De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la economía mexicana creció 1.2 por ciento anual; la inflación cerró el año en un nivel de 4.21 por ciento anual.
En tanto, la producción petrolera cerró el año pasado con una caída de 6.2 por ciento, en comparación con la registrada en el 2023.
- 1.2% creció la economía mexicana en 2024, según el Inegi
Todo para energía. De acuerdo con el CIEP, en tradición con los años anteriores durante el gobierno del expresidente Andrés Manuel López Obrador, los mayores gastos respecto de lo presupuestado se observaron en Energía con un sobreejericio de 6.8 por ciento: en particular, Pemex ejerció 24.8 por ciento más de lo aprobado en gran parte para proyectos de inversión y pensiones.
“Mientras que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) lo hizo en 7.1 por ciento, por gastos de operación al igual que pensiones y jubilaciones”, aseguró el centro de investigación.
Cae gasto. Por otro lado, el CIEP detalló que se gastó menos de lo presupuestado, es decir: hubo subejercicios del gasto en sectores como salud por 30.4 por ciento; seguridad y protección ciudadana, de 29.9 por ciento; e Infraestructura, Comunicaciones y Transportes, por 12.8 por ciento.
“Este resultado muestra una priorización selectiva que no necesariamente responde a criterios de eficiencia social o equidad”, reflexionó el instituto.
El CIEP concluyó con que “es crucial” que la ciudadanía y “los tomadores de decisión” impulsen una revisión transparente y crítica de las prioridades de gasto.
“Se deben cumplir límites fiscales, redirigir recursos a áreas prioritarias como salud y educación, y hacer que el presupuesto beneficie a la población”, concluyó.