Avizoran más ajustes tras recorte de Banxico

El Banco de México (Banxico) recortó su pronóstico de crecimiento de la economía mexicana desde un rango entre 1.7 a 2.7 por ciento, a uno de 1.1 a 2.1 por ciento; la razón principal son factores como conflictos laborales o los bloqueos en las vías férreas que se vivieron en Michoacán y la baja en los precios del petróleo.

En entrevista para La Razón, Jorge Gordillo Arias, director de Análisis Económico de CI Banco, señaló que el recorte en la perspectiva económica sólo confirma la posición de varios analistas, quienes habían comenzando a ajustar a la baja sus expectativas debido a factores que vislumbraban, serían complicados, pues se han dado a conocer algunos datos de consumo, de exportación, los cuales no han crecido de forma favorables.

“La disminución no es una buena noticia, porque confirma la posición de varios de nosotros, a partir de noviembre, la mayoría de los analistas fuimos reduciendo nuestra expectativa, incluso Banxico ya había reducido, sólo era cuestión de tiempo para que ajustara su tasa de crecimiento, tomando en cuenta el consumo, la inversión, las exportaciones, etc.”, destacó.

Por su parte, Raymundo Tenorio, director de Proyectos del Centro de Estudios Interdisciplinarios y Prospectiva, señaló que desde abril del año pasado la economía comenzaba a desacelerarse; situación que se agravó aún más a finales de año, lo anterior debido a que la inversión fija bruta dejó de crecer, porque el gasto de gobierno dejó de crecer y por el debilitamiento del gasto interno.

“Con todas estas variables, yo me he atrevido a calificar de que estamos en un periodo recesivo; entonces el Banco de México ha observado todo esto en conjunto; obviamente, el Banxico tiene más modelos econométricos que el mío, pero podría tener un ajuste más pegado al limite de 1.0 por ciento”, destacó.

De acuerdo con el gobernador del Banco Central, Alejandro Díaz de León, los elementos que están detrás de esta revisión, a nivel interno, se encuentra una desaceleración más pronunciada en el primer semestre de 2018, en particular al cierre del año, lo que genera una menor base de crecimiento para los trimestres siguientes.

El primer pronóstico de Banxico para el PIB de 2019 era de una expansión de entre 2.2 y 3.2 por ciento, divulgado en noviembre de 2017; rango que mantuvo hasta agosto de 2018, cuando lo ajustó a entre 1.8 a 2.8 por ciento. La segunda caída en la expectativa vino en noviembre pasado, para ubicarla en entre 1.7 a 2.7 por ciento.

Cabe recordar que el gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador previó en diciembre pasado que durante el primer año del sexenio, la economía crecería entre 1.5 y 2.5 por ciento. Banxico acotó que hay riesgos de choques externos que pueden venir del escalamiento de tensiones comerciales, la adopción de medidas proteccionistas, episodios de volatilidad, una desaceleración de la economía y del comercio mundial.

El peso se vio afectado por la mayor demanda del dólar  y perdió 0.08 por ciento, como activo de refugio en el mercado internacional. Banxico informó que el dólar interbancario cerró en 19.1895 unidades.