México, el tercero en AL con los aranceles más altos en el mundo

Aunque la guerra comercial por parte de Estados Unidos a China ya está bajo negociación incierta, los aranceles en el mundo continúan siendo aplicados, sobre todo entre países que no tienen acuerdos comerciales entre sí, lo que los obliga a imponer salvaguardas.

Datos de Statista revelan que las tasas arancelarias varía mucho de un país y región a otra. Por ejemplo, en Brasil éstas ascienden al 4 por ciento del valor de los productos de media mientras que en los Estados miembro de la Unión Europea ésta se reduce al 1.6 por ciento, según datos del Banco Mundial.

El dato: La Secretaría de Economía y la IP mantiene reuniones con EU para frenar los aranceles.

De acuerdo con un mapa de Statista, México es la tercera nación de América Latina con los aranceles más altos, con un promedio de 4.4 por ciento, mientras que Brasil y Argentina son de 8 y 7.5 por ciento, respectivamente. No obstante, Estados Unidos y Canadá aplican impuestos a importaciones de países con los que no tienen tratados, de 1.6 y 0.8 por ciento.

Los últimos datos de la Organización Mundial del Comercio (OMC) refieren que los aranceles en los últimos dos años se concentraron entre Estados Unidos y sus socios, aunque fue México de los que más gravámenes puso a importaciones estadounidenses, de 1 por ciento en promedio, mientras Canadá y la Unión Europea lo hicieron con 3.2 y 2.6 por ciento, respectivamente.

Para la OMC, Canadá estuvo dentro del límite de aranceles de 3.2 mil millones de dólares, por lo que el límite de represalias de 3 mil 200 millones de dólares se otorgaría a Canadá en respuesta a los 2 mil millones de dólares esperados en exportaciones de acero perdido y mil 200 millones de dólares en exportaciones de aluminio perdidas si se impusieran los aranceles. Es decir, aunque no sea un caso exitoso, para la organización es un “equilibrio de fuerzas”.

Datos del Banco Mundial refieren que los productos alimenticios, calzado, textiles, pieles, animales, transporte, plásticos y maderas suelen ser los artículos con más impuestos de exportación, siendo que muchos de esos impuestos se aplican como medidas de salvaguardas para no afectar industrias locales. Hasta 2017, los impuestos de productos alimenticios ascendieron a 21 billones de dólares.

El tipo de aranceles más utilizados son los preferenciales, los cuales se incorporaron a un acuerdo comercial preferencial en virtud del cual prometían aplicar a los productos de otro país. En una zona de libre comercio (como el Tratado de Libre Comercio de América del Norte), la tasa arancelaria preferencial es de 0 para todos.

Asimismo, la cobertura de la proporción de líneas arancelarias con tasas consolidadas de la OMC también varía entre los países y ésta varía según las regiones, ya que en América Latina, todos los países consolidan todas las líneas arancelarias. En Asia, la cobertura de consolidación varía de menos del 15  por ciento, mientras que en Bangladesh algunos impuestos rebasan el 50 por ciento del valor de la mercancía.

En caso de México, recientemente la secretaria de Economía (SE), Graciela Márquez Colín, señaló que nuestro país renovaría los aranceles al acero, calzado y textil a importaciones con los que el país no tuviera acuerdos comerciales.

Además, hace algunas semanas, la Secretaría de Economía (SE) tomó la decisión de reactivar la salvaguarda de 15 por ciento a las importaciones de acero, de 25 a 30 por ciento para el calzado, textil y confección por un periodo de medio año.

El gobierno mexicano y la iniciativa privada mantienen negociaciones con Estados Unidos para eliminar los aranceles bajo la Sección 232, luego de que hace casi un año se fijaron impuestos del 25 al acero y 10 por ciento al aluminio mexicanos.

De acuerdo con la SE, el gobierno mantiene conversaciones con el sector privado “creemos que hay una oportunidad de negociar la eliminación antes de ratificación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá”.