Difieren perspectivas de crecimiento para el último año de Gobierno

La economía mexicana tendrá una “cruda electoral en esteroides”, ya que después de los comicios presidenciales del 2 de junio próximo caerá el gasto fiscal asociado a este proceso y a los grandes proyectos de infraestructura del Gobierno federal que la llevará a crecer menos en el segundo semestre, estimó Bank of America Securities (BofAS).

El economista en Jefe de BofAS para México y Canadá, Carlos Capistrán, estimó un crecimiento de 2.0 por ciento para la economía mexicana este año, debido que prevé una ligera desaceleración de Estados Unidos o “soft landing” (aterrizaje suave), así como una caída fiscal en el país tras las elecciones.

Durante el “Seminario de Perspectivas Económicas 2024”, organizado por el ITAM, apuntó que aterrizaje suave hará que la economía mexicana se desacelere de un crecimiento estimado en 3.4 por ciento en 2023 a 2.0 por ciento al cierre de este año.

Asimismo, impactará la parte fiscal a nivel interno, ya que siempre en años electorales hay más gasto de Gobierno al principio de año y menos después, “la famosa cruda electoral, pero esta vez creo que este año vamos a tener una cruda electoral en esteroides”.

Esto, no sólo es un poco más de gasto fiscal antes de la elección, sino que ahora también se están impulsando grandes obras de infraestructura, “ahora la administración está haciendo trenes, obras muy muy grandes que generan mucho crecimiento desde varios meses antes”.

Por eso, destacó Capistrán, la inversión pública viene creciendo, incluso en 90 por ciento en algunos rubros en términos reales, lo que está impulsando el crecimiento, pero eso se acaba con la elección.

“Así es que después de la elección podemos tener ahí una caída fiscal muy importante que se puede prolongar hacia 2025, que puede hacer que el país crezca mucho en la primera mitad del año y después crezca bastante poco en la segunda mitad del año, y en parte por eso tenemos un crecimiento un poco menor que los demás (2.0 por ciento en 2024)”, agregó el economista en Jefe de BofAS para México y Canadá.

Por su parte, la directora general de Investigación Económica del Banco de México (Banxico), Alejandrina Salcedo, coincidió en que la inversión pública en proyectos de infraestructura seguirá contribuyendo al crecimiento económico del país.

Como es usual en los años electorales, dijo, el crecimiento en 2024 podría estar más sesgado hacia la primera mitad del año que en el segundo semestre.

Recordó que, para este año, el Banxico pronostica que la actividad económica podría crecer entre 2.3 y 3.7 por ciento, con una estimación puntual de 3.0 por ciento, después de una expansión de 3.3 por ciento que el instituto tiene estimada 2023 en su conjunto.

En tanto, el economista en Jefe para América Latina de Citigroup, Ernesto Revilla, informó que la institución prevé un crecimiento de 2.2 por ciento para este año, desde un avance proyectado en 3.5 por ciento para 2023.

El especialista de la institución estadounidense resaltó que “2024 parece distinto, hay motores que se están moviendo más que antes, sobre todo la demanda agregada, y quizás pondría el sesgo un poquito al alza”.

Pero IMEF sube a 2.4% avance previsto para el año

El Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) mejoró ligeramente su pronóstico de crecimiento para la economía nacional en 2024, el último año del Gobierno actual, a una tasa de 2.4 por ciento, desde el 2.3 por ciento previsto el mes pasado.

De acuerdo con los resultados de su Encuesta Mensual de Expectativas Económicas, correspondiente a enero de este año, refirió que el pronóstico de crecimiento económico más optimista es de 3.3 por ciento y el más pesimista, de 1.7 por ciento.

Para 2025, el primer año del próximo sexenio, mantuvo en 2.0 por ciento su proyección de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), mencionó en su reporte mensual.

Refirió que, por segundo mes consecutivo mantuvo su expectativa de inflación para este año en 4.0 por ciento. La expectativa más optimista sitúa a la inflación en 3.5 por ciento mientras que la más pesimista la ubica en una tasa anual

de 5.0 por ciento.

Para 2025, el organismo de profesionistas elevó ligeramente su estimado de 3.77 a 3.78 por ciento.

Señaló que la estimación de la tasa de política monetaria para el cierre del 2024 se incrementa de 9.25 por ciento pronosticada los tres meses previos a una tasa de 9.50 por ciento; en tanto que para el año siguiente ajustó al alza su expectativa de 7.50 a 7.63 por ciento.

El IMEF apuntó que su pronóstico de empleo para 2024, se mantiene por quinto mes consecutivo en 600 mil trabajadores asegurados en el IMSS, pero recortó su estimación para 2025 de 525 mil a 500 mil.

En tanto, el tipo de cambio esperado para fin de 2024 se ubica en 18.50 pesos por dólar, estimación menor a la del mes de diciembre, ubicada en 18.62 pesos por dólar, mientras que para el próximo año ve una moneda más fuerte de 19.00 pesos por dólar, desde 19.40 unidades.