Educación Financiera
Como cada año el Día del Trabajo se celebra reconociendo las arduas jornadas laborales que millones de personas viven diariamente. Por ello es importante proteger lo que día a día ganamos para asegurar nuestro futuro y por supuesto nuestro presente; esto es posible gracias a instrumentos que aminoran los riesgos utilizándolos como una buena opción para mantener resguardado de manera práctica el dinero que nos deposita la empresa.
Una de las opciones es la tarjeta de débito, que evita la necesidad de llevar a todos lados el efectivo y que además puede ser utilizada como cuenta de ahorro. Tal vez ya tengas una, pues gran parte de las empresas utiliza cuentas de nómina para depositar y proteger el dinero de sus trabajadores sin cargo alguno.
La tarjeta de nómina cuenta con medidas de seguridad, como el chip, la banda magnética, panel de firma y número de tarjeta, con ella puedes hacer compras o retirar efectivo en cajeros automáticos, mismos que se deducen de tu cuenta.
Te recomendamos que retires dinero desde los cajeros automáticos de tu banco, para evitar que se te cobre comisión por disposición de efectivo o consulta de saldos. Cuando compres en algún establecimiento revisarán tu firma en el anverso de la tarjeta y se te solicitará una identificación oficial, además buscarán el Número de Seguridad (un código impreso al reverso de tu tarjeta que regularmente se compone de tres números) para digitarlo y validar que la tarjeta es auténtica.
En la parte frontal encontrarás el número de tarjeta (único e irrepetible) que te identifica como cliente del banco. Abajo verás la fecha de vencimiento, donde está el mes y el año en que deberás renovarla.
Por otro lado, el Número de Identificación Personal (NIP) es un código que se compone de cuatro dígitos y con el que accedes a los servicios de los cajeros automáticos (ATM) y operaciones electrónicas, sólo tú debes conocerlo ya que es como tu firma electrónica.
Es necesario tomar algunas medidas de seguridad como memorizarlo, no recibir ayuda de extraños al realizar tus operaciones, no proporcionarlo por Internet e ignorar los correos electrónicos que pidan tus datos, además de cambiarlo periódicamente para que no pueda ser utilizado por nadie más.
Recuerda que no debes diseñar contraseñas de fácil reconocimiento, como tu año de nacimiento, tu dirección o algún número característico de tu personalidad.
El uso de la tarjeta es una buena alternativa, pues permite transportar tus ahorros con seguridad, por esta razón es importante tener en cuenta las recomendaciones y así disfrutar de tu salario sin preocupaciones.
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