“Es un hecho comprobado que el pueblo
ha logrado cambiar muchas veces
de tirano, más nunca suprimirlo.”
Baruch Spinoza
Con motivo de las campañas políticas a la Presidencia de la República, varios de los candidatos propusieron eliminar el fuero a quienes lo gozan, como son el Presidente de la República, Diputados, Senadores, Gobernadores, Presidentes Municipales, Ministros y Magistrados, todos ellos protegidos por el Fuero, y debido a que en los últimos años, se ha generado gran cantidad de actos de corrupción en que se han visto inmersos diversos funcionarios que gozaban del fuero, por lo que se ha puesto en tela de juicio su permanencia; lo que en su origen fue creado para protegerlos de represalias del poder público, actualmente ha servido principalmente para hacer más difícil el sujetarlos a un proceso legal.
El Fuero nace en México desde la Constitución de Cádiz de 1812, en el Reino de España, como una forma de protección contra el Régimen que perseguía a sus críticos, por lo que la primer Constitución del México independiente de 1824, lo establece para los miembros del poder Legislativo, y es una forma de protegerlos para que puedan desempeñar libremente su función, expresando sus criticas y condenas al propio régimen, sin embargo esta protección que inicialmente funcionó, actualmente se ha usado principalmente para protegerse de los actos de corrupción en que han incurrido cantidad de funcionarios y legisladores y que para juzgarlos se vuelve tortuoso y lento el proceso, por lo que muchas veces no se les logra desaforar, por la protección de los miembros de su propio partido.
El primer caso de desafuero en México fue en 1909 contra el entonces Diputado José López Portillo y Rojas (abuelo del ex Presidente José López Portillo) el cual fue procesado y juzgado; el más emblemático ha sido el de Belisario Domínguez, quien después de su discurso en la Cámara de Senadores el 29 de septiembre de 1913 en contra el régimen de Victoriano Huerta, fue perseguido y asesinado, por lo que un grupo de legisladores propugnó por una investigación hasta llegar al responsable, quien resultó ser un allegado a Huerta, por lo que después de ello el propio Huerta Decretó el 10 de octubre de 1913 la disolución del Congreso, para después salir huyendo del país.
Un caso reciente de desafuero fue el de René Bejarano, quien en el 2004 fue desaforado por una votación de 444 votos a favor, 7 en contra y 15 abstenciones, acusado de promover conductas ilícitas, operaciones con recursos de procedencia ilícita y delito electoral, sin embargo le fue concedido un amparo para no ser detenido, pero cinco días después se entregó voluntariamente, para que después de un breve tiempo preso saliera libre, sumando solo nueve casos de desafuero en total, muy pocos para el gran número de casos de corrupción.
En estos días de efervescencia política, y ante los escándalos de corrupción, casi todos los candidatos a la Presidencia de la República se han manifestado a favor, por lo que seguramente será aprobada, sin haber realizado un estudio profundo de los pros y contras de la propuesta, lo que puede resultar como un balazo en el pie.