VIÑETAS LATINOAMERICANAS

Ecuador: las dudas y el reconocimiento

Rafael Rojas. *Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón
Rafael Rojas. *Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón Foto: larazondemexico

Las elecciones en Ecuador dejan un saldo de duda e incertidumbre que no puede achacarse únicamente al error de las encuestas. Todos los sondeos y los propios equipos de campaña de Daniel Noboa y Luisa González pronosticaban un cierre más cerrado en favor de una u otro. La diferencia de 12 de puntos con que Noboa se habría impuesto a González es poco creíble. De hecho, el propio oficialismo ecuatoriano ha sido incapaz de explicar el repunte.

No es imposible un giro de esa naturaleza en cualquier proceso electoral. Entre los dos miedos que pulsearon en la campaña, como ha observado Daniel Kersffeld, pudo haber vencido el de quienes temían un regreso del correísmo y la izquierda bolivariana al poder en Ecuador. Esos electores habrían tenido razón al temer que una vuelta a esa línea, en medio de la inseguridad, la violencia, el avance del crimen organizado y la inestabilidad económica que podría alentar la presión arancelaria de Donald Trump, complicara más las cosas en Ecuador. Ese miedo pudo ser más grande que el de quienes, con igual razón, esperan lo peor de un nuevo gobierno de Noboa, quien ha dado muestras suficientes de militarismo, reeleccionismo y alineamiento con Milei, Bukele y Trump.

Sin embargo, es indispensable que se complete el conteo oficial y se satisfagan legalmente los recursos que interponga la candidata González para que los resultados ganen cierta certidumbre. A pesar de que ese proceso no ha culminado, algunos gobiernos de la izquierda regional, como los de Chile, Uruguay y Brasil, han reconocido el triunfo de Noboa. La Presidenta Claudia Sheinbaum y el presidente Gustavo Petro, quien por su frontera con Ecuador conoce como pocos la situación de ese país, han preferido esperar.

Quien tampoco ha esperado y se ha adelantado a denunciar un “fraude horroroso e inaudito” en Ecuador es Nicolás Maduro en Venezuela. La acusación va más allá de la posición oficial de la candidata González y el partido de la Revolución Ciudadana, que apuestan por la ruta legal e institucional de solución de conflictos poselectorales, establecida por el Consejo Nacional Electoral de la República ecuatoriana.

Maduro y sus seguidores en América Latina buscan forzar el paralelo entre el fraude en Venezuela, en el verano de 2024, y las irregularidades por demostrar en el actual diferendo ecuatoriano. La falsa equivalencia entre esos fenómenos les permite acusar de hipocresía a la comunidad internacional que hoy reconoce el triunfo de Noboa y que desconoció el triunfo de Maduro el año pasado. La diferencia radica en que la oposición ecuatoriana confía en el árbitro electoral y ahora mismo está verificando las actas del escrutinio.

Otra vez se evidencia que no son dos las izquierdas que dividen a América Latina y el Caribe sino tres o más. Lula, Boric y Orsi reconocieron el triunfo de Noboa; Sheinbaum y Petro pidieron aguardar por los resultados del conteo oficial; Maduro, sin pruebas, grita fraude.

Temas: