El crecimiento de la economía se mide por el comportamiento de la producción de bienes y servicios para el consumo final, el Producto Interno Bruto, y conviene que sea el mayor posible por dos motivos: (i) para minimizar la escasez, el hecho de que no todo alcanza para todos, menos en las cantidades que cada uno quisiera, y mucho menos gratis, se debe producir la mayor cantidad posible de bienes y servicios, es decir, la economía debe crecer lo más posible; (ii) la producción está relacionada con la creación de empleos, ya que para producir alguien debe trabajar, y con la generación de ingresos, ya que a quien trabaja se le paga, y para que la creación de empleos y la generación de ingresos sea la mayor posible se requiere que la producción sea la mayor posible, es decir, que la economía crezca lo más posible.
¿De qué depende la producción de bienes y servicios? De las inversiones directas, que los empresarios destinan, precisamente, a producir satisfactores, uno de cuyos componentes principales es la inversión fija bruta en instalaciones, maquinaria y equipo, que proporciona la infraestructura física para poder llevar a cabo la producción, por lo que es un buen indicador de las inversiones directas, inversión fija bruta que suma nueve meses consecutivos, de septiembre de 2024 a mayo de 2025, decreciendo, lo cual, por todo lo que depende de ella (producción, empleos, ingresos, bienestar), es una mala noticia.
Este fue el decrecimiento, en términos anuales, de la inversión fija bruta total en esos nueve meses: septiembre, 2.1%; octubre, 4.5%; noviembre, 1.1%; diciembre, 4.5%; enero, 6.2%; febrero, 5.7%; marzo, 5.0%; abril, 7.6%; mayo, 6.7%. Promedio: 4.82%.

Magnicharters, de pena
En mayo del año pasado la inversión fija bruta total creció 5.1%. En mayo pasado decreció 6.7%. Entre enero y mayo del año pasado creció, en promedio mensual, 9.3%. Entre enero y mayo pasados decreció 6.24%.
La inversión fija bruta en construcción no residencial (fábricas, bodegas, oficinas, centros comerciales, vías de comunicación, y todo lo que contribuye a la producción, distribución y oferta de bienes y servicios, y por ello al crecimiento de la economía), suma ya doce meses, de junio de 2024 a mayo de 2025, con crecimiento negativo, lo cual es una pésima noticia.
Este fue el decrecimiento, en términos anuales, de la inversión fija bruta en construcción no residencial, en esos doce meses: junio, 1.3%; julio, 0.2%; agosto, 5.5%; septiembre, 12.6%; octubre, 16.6%; noviembre, 15.6%; diciembre, 17.3%; enero, 14.9%; febrero, 15.6%; marzo, 17.0%; abril, 12.5%; mayo, 17.1%. Promedio: 12.18%.
En mayo del año pasado la inversión fija bruta en construcción no residencial creció anules, 6.1%. En mayo pasado decreció 17.1%. Entre enero y mayo del año pasado la inversión fija bruta en construcción no residencial creció, en promedio mensual, 18.94%%. Entre enero y mayo pasados decreció 15.42%.
Si el comportamiento de la inversión fija bruta total es una mala noticia, el de la inversión fija bruta en construcción no residencial es pésima, motivo de preocupación, porque es la prueba de la desconfianza de los empresarios para invertir directamente, como lo confirma el indicador de confianza empresarial del Inegi.
Continuará.

