Cada vez que se plantea un aumento de impuestos, hay dos partes que argumentan: los que los defienden y los que los critican. Obviamente los que los defienden hablan de cuál será el destino, o sea, a beneficio de quién, quiénes, o a qué sector. Igualmente pasa con los que los critican, porque siempre hay a quien le afecte tal o cual medida.
En fin, en este espacio no estamos ni de un lado ni del otro, porque creemos que hay beneficiados y afectados por igual, así es que aquí le va nuestro breve desglose:
IMPUESTO A LOS REFRESCOS. Definitivamente, uno de los más afectados será Noroña. Cada vez que le preguntan por su casota de 12 millones de pesos, recurre a la misma estrategia: darle un traguito al refresco. Nadie sabe si es por sed o para ganar segundos y pensar la respuesta menos incorrecta. Ya ven que siempre se enreda con lo del préstamo, las escrituras, la austeridad o los gastos que no cuadran con sus ingresos. Así que, entre trago y trago, se compra unos segundos. Nuestro software especializado en “conteo de refrescos en entrevistas de Noroña” hizo un estudio y el resultado es contundente: por cada entrevista, el promedio es de 20 latas. Y eso sólo “para hacer tiempo”.
IMPUESTO A LOS VIDEOJUEGOS. Los mayores beneficiados de lo que se recaude de este impuesto serán los más pobres del país. Y es que, aunque usted no lo crea, el que más uso les ha dado a los videojuegos es el presidente nacional del PRI, Alito Moreno, ya que son horas y horas las que pasa detrás de una pantalla jugando Street Fighter y Mortal Kombat. Nos dicen fuentes cercanas al líder partidista que de ahí aprendió “los prohibidos”, esos mismos que usó en su combate en el Senado.
IMPUESTO A LAS APUESTAS. Aquí los más afectados son algunos miembros de la oposición, como Lozano, Téllez, Cortés, Acosta Naranjo, etc. Tienen por lo menos desde que inició la administración del presidente Trump haciendo apuestas sobre detenciones de políticos (como si sus amigazos no tuvieran cola que les pisen). Por cierto, esas apuestas las han hecho con base en puras invenciones, por ejemplo: “la lista de Marco”, “la lista de las visas”, “la lista de los que pudieran estar en una lista”, “la lista de los que van a acusar a Washington”, y así cada cosa que sacan para enrarecer el ambiente. El problema es que no le han atinado a ninguna, y según nos dicen, el gusto por las apuestas también está en ganar, cosa que hasta hoy no han logrado. Nos comentan que, de seguir así, y con los impuestos que pretenden imponer a estos juegos, la estrategia la tendrán que cambiar por cosas más sencillas como el volado, piedra, papel o tijera, y el disparejo. Juegos que, hasta ahora, no serán gravados.
LA ÚLTIMA… Un impuesto al cinismo y a la mentira. ¿Quién cree usted que sea el más afectado? Escriba aquí su respuesta:____________________________________________________________
…Y NOS VAMOS.