Si usted piensa que les “leyeron la cartilla” a las plataformas digitales respecto a la reforma al artículo 30-B del Código Fiscal de la Federación, está en lo correcto. Al menos esos fueron los comentarios que se escucharon entre los asistentes a la sesión de trabajo entre autoridades fiscales y representantes de las principales plataformas digitales que operan en México, con el objetivo de desglosar la implementación de este apartado del Código Fiscal de la Federación.
Esta modificación legal exige que las empresas tecnológicas faciliten a la autoridad acceso en línea y en tiempo real a información estrictamente fiscal, con el propósito de verificar el cumplimiento de obligaciones en un entorno en el que la actividad digital crece de manera acelerada. La reunión se desarrolló bajo un enfoque técnico y de colaboración y se destacó que los mecanismos previstos buscan otorgar seguridad jurídica, respetar la privacidad de los usuarios y optimizar los procesos de supervisión fiscal.
En el encuentro, especialistas del área Jurídica y de Tecnologías de la Información del SAT expusieron los detalles de la propuesta normativa que se emitirá para delimitar con precisión qué información deberá compartirse y en qué formato. La autoridad subrayó que se trata exclusivamente de datos de índole fiscal, lo que permitirá a las plataformas identificar con claridad los elementos sujetos a revisión y evitar la entrega de información ajena a temas tributarios. También se explicó que las empresas podrán elegir el mecanismo técnico mediante el cual darán acceso —sistema, interfaz o aplicativo— lo que les concede flexibilidad para adaptar la implementación a su infraestructura tecnológica, su volumen de datos y la naturaleza de sus servicios digitales.

Acuerdo para levantar bloqueos
El encuentro reunió a compañías como Meta, Amazon, TikTok, Mercado Libre, DiDi, Rappi, Netflix, Walmart, Airbnb y diversas asociaciones industriales, lo que permitió una conversación amplia sobre los retos derivados de la reforma. La sesión funcionó como un espacio para revisar inquietudes, analizar escenarios operativos y plantear soluciones escalables que permitan cumplir con la regulación sin afectar la continuidad de los servicios digitales. Además, se estableció un entendimiento general sobre la necesidad de armonizar los tiempos de implementación con la realidad tecnológica de cada plataforma, especialmente en un ecosistema digital caracterizado por modelos de negocio distintos y niveles de automatización desiguales.
Aunque las autoridades y las plataformas acordaron mantener abiertos los canales de comunicación para continuar el diálogo técnico y pulir los detalles de la implementación, el verdadero reto aún está por verse. Si bien existe voluntad inicial de colaboración, el cumplimiento efectivo dependerá de la capacidad operativa, tecnológica y regulatoria de cada empresa, así como de su disposición a modificar sus sistemas internos para alinearse con un esquema de supervisión fiscal más riguroso. En los próximos meses se observará hasta dónde acatan esta nueva resolución las plataformas digitales y cómo equilibran la presión regulatoria con la eficiencia operativa en un sector que demanda velocidad, flexibilidad e innovación constante.
Acuerdo estratégico. La alianza estratégica entre la Secretaría de Economía y el Fondo de Fondos representa un intento decidido por reactivar un ecosistema emprendedor que llevaba años demandando mayor coordinación, claridad institucional y una ruta efectiva para canalizar recursos hacia proyectos innovadores. El anuncio, realizado en el marco del InnovaFest Latam 2025 – STS Forum, marca un punto de inflexión en la política de apoyo al emprendimiento, luego de un periodo en el que la articulación entre actores públicos, fondos de capital y organismos de financiamiento había avanzado de manera desigual. Ya ni quien se acuerde del Instituto Nacional del Emprendedor (Inadem), que vivió sus años de gloria en el pasado, pero en el que también unos pillos hicieron malos manejos, pero como parte del nuevo plan, la Secretaría de Economía destinará 300 millones de pesos a un esquema de coinversión dentro del Fondo de Innovación Plan México, un vehículo que será construido a través del Fondo de Fondos con el respaldo de Nafin. La intención es detonar empresas emergentes, ampliar el alcance del capital inteligente y generar condiciones para que las MiPymes y personas emprendedoras accedan a una infraestructura financiera más profunda y especializada, especialmente en sectores donde México busca avanzar hacia una industrialización más compleja y competitiva.
El acuerdo, suscrito entre el Fideicomiso del Fondo de Microfinanciamiento a Mujeres Rurales y la Corporación Mexicana de Inversiones de Capital, es el resultado de una coordinación institucional que buscó destrabar un proceso que se había estancado por falta de alineación en los instrumentos de apoyo. La alianza prioriza industrias clave de la política industrial, manufactura avanzada, semiconductores, automotriz y electromovilidad, farmacéutica y biotecnología, tecnologías de la información y agroindustria de nueva generación, con el objetivo de fortalecer cadenas de valor que requieren no sólo capital, sino acompañamiento técnico y visión de largo plazo. También se articula con la meta del Plan México de lograr que 30 por ciento de las MiPymes accedan a financiamiento, una cifra ambiciosa que demanda una oferta más robusta de instrumentos y una vinculación más estrecha con los fondos de inversión. Con este pacto, Economía y Fondo de Fondos envían una señal de certidumbre al ecosistema emprendedor y buscan incentivar a inversionistas nacionales e internacionales; sin embargo, será en la implementación donde se medirá el verdadero alcance de la estrategia, y donde se verá hasta dónde acatan esta nueva resolución las empresas que participan en los sectores estratégicos del país.

