Arturo Vieyra

Banxico con preocupaciones latentes

BRÚJULA ECONÓMICA

Arturo Vieyra*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
Arturo Vieyra
*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
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Uno de los documentos más importantes de política económica es el Informe Trimestral de Inflación elaborado por el Banco de México. En el más reciente correspondiente al tercer trimestre de este año, se exponen el diagnóstico oficial sobre la situación económica del país, sus principales problemas y el comportamiento de la inflación en México. Además, se da conocer la perspectiva del banco central que dará fundamento a importantes medidas de política monetaria en los meses siguientes que resultan fundamentales para la toma de decisiones de los distintos agentes y para la estabilidad macroeconómica.

En materia de crecimiento económico, continúa fortaleciéndose el optimismo del banco central, ya previamente perfilado con cifras recientes de actividad económica y con los ajustes al alza por parte de los analistas en el pronóstico del PIB para este año y el siguiente. Como hemos dado a conocer en este espacio, la actividad económica en México en el tercer trimestre del año ha venido dando signos de fortaleza comandada en lo externo por la actividad manufacturera todavía boyante en Estados Unidos y el continuo flujo de remesas, y en lo interno, por la persistencia en el crecimiento del empleo y los salarios reales.

Este mejor desempeño económico ha llevado a Banxico a realizar un importante ajuste en su perspectiva de crecimiento económico para este año incrementándolo hasta 3.0% desde 2.2% en su informe anterior. En paralelo, también mostró un ajuste moderado al alza en su pronóstico de PIB para el próximo año hasta 1.8% desde 1.6% previo.

En materia de inflación, la perspectiva no luce positiva. Los pronósticos permanecieron igual a los publicados en el último comunicado de política monetaria con expectativas para la inflación general de 8.3% en el último trimestre de este año y de 4.1% para el cuarto trimestre del 2023. Vale la pena mencionar que para Banxico el pico de la inflación general ya se alcanzó en el tercer trimestre y perfila una tendencia a la baja hasta que, finalmente, se alcance el objetivo puntal de inflación de 3.0% hacia finales del 2024. Su preocupación principal está en la inflación subyacente (75% del INPC) cuyo comportamiento al alza no ha cedido y, según las previsiones del banco central, podría empezar a bajar a principios del próximo año.

Las preocupaciones sobre la inflación —prioridad en el quehacer del banco central— no son menores, y de ello está consciente la autoridad monetaria al manifestar claramente que si el componente subyacente del INPC no cede continuará fortaleciendo la astringencia monetaria. Asimismo, Banxico se desprendió correcta y razonablemente de colocar su postura monetaria solamente al lado de la FED en Estados Unidos, dando señales de independencia, proponiendo además de la importancia de la política monetaria del vecino del norte, una estrategia más acorde con las condiciones de mercado en México. Pero algo sí quedó muy claro, y es que la tasa de interés de referencia continuará subiendo en los próximos meses, la duda es en que magnitud.

Sin duda, es destacable la actitud serena y responsable de Banxico para enfrentar la difícil coyuntura económica por la que atravesamos. Esperemos que siga así.