“Un tren sin trabas”

DESDE LAS CLOACAS

El Duende
El DuendeLa Razón de México
Por:

En los pasillos de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales ya regresó el estrés, y es que en estos días comenzarán con otra de las etapas de evaluación ambiental de más tramos del Tren Maya.

Hay que recordar que, en diciembre del año pasado, la Semarnat dio su “visto bueno” para la construcción de estos tramos de la primera etapa del proyecto del sexenio, a través de la Manifestación de Impacto Ambiental a cambio de obras de mitigación y compensación en la materia.

¿Y por qué el estrés? Pues porque, me cuentan fuentes al interior de la dependencia federal, que el paquete o la orden para la realización de las resoluciones, viene ya con un dardo envenenado, que trae la consigna de no encontrar trabas y de darle “vía libre” al tren con el que el Presidente Andrés Manuel López Obrador se ha empeñado en pasar a la historia.

Y esa consigna, esa orden, ese mandato para que no le encuentren mayores peros a los siguientes tramos, me dicen, viene desde el mismísimo Palacio Nacional, que ya desde el año pasado se había pedido cuadrar las deficiencias de los primeros estudios de impacto ambiental, mismos que no contemplaron que para un proyecto de esta envergadura se requieren análisis de un lustro sobre la flora y la fauna de la península yucateca.

Por si fuera poco, el trabajo de los evaluadores de la Semarnat, que revisarán lo que Fonatur les envíe, se enfrentará a la observación de organizaciones de comunidades indígenas que desde que se anunció el proyecto han denunciado que esta obra provocará profundos daños al medio ambiente.

Aunque, no canten victoria, como lo dijimos en este mismo espacio hace unos meses, aún falta ver qué dicen las auditorías que se realizarán a los trabajos de Semarnat. Eso dará luz sobre este proyecto.

En el baúl. Esta semana la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, será una de las protagonistas que participará en el Foro Generación de Igualdad, un evento mundial organizado por la ONU y coordinado por los gobiernos de México y Francia. En él estarán presentes organizaciones feministas, el sector privado y el Gobierno de México, para intercambiar puntos de vista, reconocer los desafíos y trabajar hombro con hombro para impulsar el desarrollo de las mujeres, libres de discriminación y violencia.

Interesante momento, sobre todo cuando las cifras del Secretariado Ejecutivo indican que durante la pandemia por Covid-19 (de marzo 2020 a febrero 2021), en el país fueron asesinadas 3 mil 679 mujeres, pero sólo 918 casos son investigados como feminicidios. Los mismos datos oficiales indican —peor aún— que durante los dos primeros meses de este año la violencia de género incrementó 30.5% en comparación con el mismo periodo de 2020. Definitivamente no será fácil la participación de Sánchez Cordero en éste foro.