Jorge Camacho

Hacia junio del 2022

ELUCIDACIONES

Jorge Camacho *Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
Jorge Camacho 
*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
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El proceso electoral está en marcha, en los estados donde habrá elecciones ya se están dando los primeros enfrentamientos. La polémica no surge únicamente entre diferentes partidos, sino al interior de cada uno, dentro de cada alianza de partidos. Los precadindatos pelean por su postulación oficial. De momento, sólo existen tiras y aflojas para acceder al nombramiento.

Cada alianza tiene sus métodos: la encabezada por Morena opta por unas encuestas discutibles que curiosamente siempre se resuelven a interés de Palacio Nacional. En el otro lado, la coalición PAN-PRI-PRD deberá sentarse a decidir qué candidato conviene a cada estado. Movimiento Ciudadano se presentará ante la ciudadanía como franquicia única, buscando naturalmente sus propios intereses políticos que, hasta ahora, le ha dado buenos resultados. Hay tradiciones en la alianza PAN-PRI-PRD. El PRI ha gobernado Hidalgo hasta este momento sin alternancia en el gobierno; Durango ha sido priista hasta las últimas elecciones hace ya seis años. Parece que la decisión de los candidatos en estos estados recaerá en el PRI al interior de la alianza.

Es momento para que el PRI en Hidalgo se reencuentre con su militancia, recupere a sus votantes, se presente como una alternativa fiable, más sólido en coalición con los otros dos partidos. La alianza tiene en este estado posibilidades de derrotar a Morena. De todas formas, deberán trabajar mucho y bien si quieren plantar cara, aparecer como una opción atractiva, mostrarse como una alternativa interesante. Distinto es el caso de Durango, en donde el gobernador es del PAN. Si el PRI quiere retomar el gobierno, deberá pactar con el PAN su candidato, de otra manera, ambos perderán frente a Morena.

Caso distinto a lo que sucede en Aguascalientes, baluarte panista, no parece que haya negociación para el candidato de coalición, puesto que todo indica que la designación recaerá en Acción Nacional. En todo caso, quizás el PRI ceda en este estado a cambio de nombrar a su candidato en Durango. A esto se añaden las elecciones en Tamaulipas, en donde el PAN también quiere la candidatura. No es descartable que ambas candidaturas entren en la negociación de Durango. Con todo, en las próximas semanas se despejará el panorama, pero se antoja que las tensiones y polémicas están por venir.

Los cambios que ha vivido el mundo han sido demasiado vertiginosos para que puedan interiorizarlos quienes tienen fe en las viejas cosmovisiones. Por lo tanto, se debe enfrentar este proceso electoral con estrategias dirigidas a votantes políticamente muy activos e informados. Las campañas deben acercarse a los elementos más avanzados de medición e investigación permanentes, y sería irresponsable no atender las necesidades de la gente antes que los egos de los candidatos y sus equipos. Si bien es cierto que el resultado de las elecciones depende de los candidatos, tambien es real que es imposible que se fabriquen candidatos. No existen fórmulas mágicas para hacer candidatos. Las campañas, sin duda, harán uso y abuso de las redes sociales; sin embargo, no hay nada como el encuentro personal entre el candidato y el votante. Para una campaña exitosa, es necesario que los candidatos recorran casa por casa colonias, pueblos y ciudades. Omitir este deber es abocarse al fracaso.