Julia Santibáñez

Relaciones actuales entre literatura y poder (II)

LA UTORA

*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
Por:

Sigo bordando en torno al rol que tenemos las escritoras y escritores hispanos. No son ideas de generación espontánea (¿alguna lo es?), sino resultado de Con acento, III Encuentro de Creadores Iberoamericanos, organizado por UNAM España, Fundación Casa de México en España y la Coordinación de Difusión Cultural de la UNAM, del 9 al 11 de abril, en Madrid.

8. Lo político incide en nuestro trabajo. Si alguna o alguno asegura no abordarlo, tal vez sólo es inconsciente de ello. La fuerza de la migración en nuestros países, el caos ambiental, la escalada de los populismos, el cuestionamiento frontal a la familiez, la nueva conciencia sobre el patriarcado y las violencias de género, más la contundencia de la sexodiversidad permean nuestra literatura. Atiborran las mesas de novedades en librerías.

9. Existen diversas opiniones sobre si es palpable una búsqueda por comunicar las realidades actuales con formas narrativas renovadas. Algunos pensamos que sí, que se experimenta a través de la fragmentación, la hibridez, el new weird, por decir algo. Otros señalan lo contrario, que las formas son las mismas desde el siglo XIX, si bien las temáticas han cambiado.

10. Los feminismos son acaso la única revolución vigente y vital tras la caída de las utopías. Y aunque reconocemos avances notables, los pendientes resultan abrumadores. Uno es la división entre las olas del movimiento: según varias jóvenes. el cambio empezó con ellas, a raíz del #MeToo, y no valoran a sus predecesoras, mientras feministas mayores miran con desdén las protestas del #8M. En todo esto la cultura deviene espacio relevante de diálogo, tanto para remirar el pasado desde ojos feministas como para proponer futuros.

11. Los libros de autoras aún son medidos con un rasero más estricto. Tanto nosotras como ellos firmamos títulos estupendos y otros pésimos, pero si se trata de una ella, nunca falta quien señala: la publican por ser mujer, por cuota de género. Cuando se trata de ellos, nadie subraya cuota de género, aunque lo sea.

12. Hoy el papel de los intelectuales carece de relevancia, en tanto las redes sociales son arena para expresar puntos de vista sin la obligación de sustentarlos. Con todo, algunas y algunos creadores tienen peso en la conformación de la opinión pública, a través de columnas en varios medios. Surge la pregunta: ¿escriben para regodearse entre quienes les aplauden o para ampliar el espectro del debate?

13. Otras formas de participación desde la literatura parten de y llegan a la propia labor escritural y/o el activismo abierto, cada vez más vigoroso en el gremio.

Vuelvo a casa rebasada de inquietudes, a elegir lo mejor posible las palabras para un poema, una crónica, una columna. “A veces un hombre o una mujer imponen su desesperación a otra persona, a eso lo llaman alternativamente desnudar el corazón, o desnudar el alma”, dijo Louise Glück. Ahí cifro mi logro o mi fracaso. Y eso también es político.