Roberto García Requena

Megacable, con poder sustancial de mercado

BANDA ANCHA

Roberto García Requena *Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
Roberto García Requena 
*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
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El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) acaba de dar un golpe de autoridad al declarar a la empresa Megacable con poder sustancial en el segmento de televisión de paga. Aunque ya había indicios de ello desde hace más de un año, el pleno del órgano regulador-en sesión extraordinaria-, así lo decidió apenas la semana pasada.

Al resolver el expediente AI/DC-003-2019, el regulador determinó que la empresa que dirige Enrique Yamuni cuenta con una amplia participación de mercado, y que, además, decide unilateralmente el precio de un servicio, sin necesidad de ser el único productor de este.

El antecedente más inmediato de esto data del 2019, cuando Megacable llegó a un acuerdo con Axtel para comprarle cerca de 50 mil suscriptores, así como su negocio de fibra óptica en ciudades como Toluca, Guadalajara, Querétaro, Puebla y León, en una operación que rondó los $1,150 millones de pesos.

Tras concretar este acuerdo, la Autoridad Investigadora del Instituto observó desde 2020 que Megacable tenía poder sustancial en once mercados de TV de paga en esas mismas localidades, lo que evidenciaba su gran participación de mercado. Así se consignó en un dictamen preliminar.

A esto se sumó otro tema que detectó el IFT en su indagatoria, que la cablera llevaba a cabo prácticas que van en contra de la ley de competencia, al forzar a sus usuarios a contratar de manera obligatoria tanto el servicio de banda ancha fija como el de televisión de paga, sin darle la posibilidad de elegir al consumidor, lo que es a todas luces violatorio a los derechos de un consumidor o cliente.

En este sentido es lógico pensar ahora que Megacable se encuentra en esta situación, deberá enfrentar un conjunto de medidas regulatorias específicas que le impondrá el órgano regulador para delimitar su poder sustancial, y sobre todo para dar paso en su modelo de negocio a prácticas más competitivas, que no menosprecien ni que quiten libertad para elegir a sus propios suscriptores.

Va a ser interesante como se reacomoda el mercado de TV restringida, sobre todo en aquellas plazas donde Megacable tenga una fuerte presencia y se le imponga una serie de restricciones regulatorias. Seguramente habrá mayor apertura a la competencia, y todo en beneficio del usuario final que tendrá acceso a mayores ofertas y con precios más asequibles.

Estaremos muy atentos a las resoluciones finales del IFT en este tema.