El primero de su tipo en México

IPN inaugura el primer Laboratorio Nacional de Vacunología y Virus Tropicales

El Laboratorio Nacional de Vacunología y Virus Tropicales, ubicado en la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas, ayudará a la investigación científica en materia de generación de biológicos para contener diversos virus

IPN inaugura el primer laboratorio Nacional de Vacunología y Virus Tropicales.
IPN inaugura el primer laboratorio Nacional de Vacunología y Virus Tropicales.Foto: Especial
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Junto al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), el Instituto Politécnico Nacional (IPN) inauguró el Laboratorio Nacional de Vacunología y Virus Tropicales en la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB), el primero de su tipo en México.

Este laboratorio se edificó con el objetivo de "potenciar la capacidad de investigación científica y clínica en materia de generación de biológicos para contener virus como COVID-19, VIH, influenza, chikungunya y zika", como informó el instituto en un comunicado.

El director general de la casa de estudios, doctor Arturo Reyes Sandoval, manifestó que se trata de un  laboratorio de alta contención biológica para realizar investigación de frontera con virus de alta patogenicidad, algo que no se puede realizar en cualquier lugar.

Acompañado por el Subsecretario de Prevención y Promoción de la Secretaría de Salud (SSa), Hugo López-Gatell, el director del IPN aseguró que,  a corto plazo, se realizarán ensayos clínicos para la vacuna contra el Chikungunya de AstraZeneca desarrollada en Oxford.

Explicó que se trabajará en el diseño y evaluación de vacunas, y contención de enfermedades originadas por virus; también desarrollarán investigación de frontera para nuevos candidatos vacunales, se harán ensayos tempranos de vacunas y se dará servicio a industria. 

Además, tiene capacidad de apoyar el desarrollo de vacuna Patria contra COVID-19, e implementarán ensayos tempranos para evaluar la eficacia de vacunas y antivirales.

Por su parte, López-Gatell dijo que dentro de las lecciones aprendidas durante la crisis por la influenza H1N1 de 2009 incluía la reflexión de que México no estaba preparado para contender a un evento de esta naturaleza, porque sus capacidades de vigilancia estaban pasando por un proceso de transformación que, en su momento, se centró en consolidar la capacidad de la red de los laboratorios.

“No había una preparación apropiada; tenía que ver con la capacidad de producir fármacos porque el estado mexicano había decidido, mucho tiempo atrás, dejar la capacidad a las entidades privadas”, comentó.

CEHR