¿Qué es el phubbing y por qué está rompiendo relaciones en todo el mundo?

Te ha pasado, lo sabemos. Todas aquellas personas que tienen un celular y de pronto están en una reunión; platicando con algún amigo o amiga; teniendo una conversación con la familia, lo han padecido y, seguros estamos, que lo siguen padeciendo. Es más, los más pequeños de la casa, niños y niñas, quizá son quienes se convierten en el mayor número de víctimas de este mal comportamiento. 

El phubbing es una conducta que se cuestiona y que afecta las relaciones interpersonales, ya sea en el trabajo, con los amigos o en casa, con la familia. La más grave consecuencia no es que se dañen las relaciones, sino que se lleguen a romper totalmente, como ya está sucediendo en muchas partes del mundo. 

¿Qué es el phubbing?

El phubbing es un comportamiento que se tiene más que normalizado y que afecta nuestras relaciones personales y también nuestra salud mental. ¿Te ha pasado que sales con algún amigo o amiga o con tu pareja, y esa persona se la pasa mirando su celular sin ponerte atención? O por el contrario: ¿Tú has sido esa persona que se la pasa mirando su celular mientras está "conviviendo" con otra persona? Eso es el phubbing. 

Su nombre se deriva de la combinación de dos palabras en inglés: "Phone" y "Snubbing" que significa despreciar, desdeñar o ignorar de manera deliberada a alguien. El phubbing es enfocar nuestra atención en el celular, en lugar de interactuar con la persona que tenemos enfrente. 

El autocontrol, de acuerdo a investigadores de la Universidad de Kent, es un gran factor de influencia para desarrollar phubbing, pues a menor capacidad de autocontrol, más probabilidad hay de que esa persona tenga adicción al celular y a navegar en Internet todo el tiempo. 

¿Cuáles son los síntomas del phubbing?

¿Cómo es que el phubbing rompe las relaciones?

Investigadores de la Universidad de Baylor, en Texas, estudiaron los efectos del phubbing y revelaron que a mayor número de veces que una persona de la relación miraba su celular, mayores conflictos y discusiones con su pareja tenían; la calidad de las charlas y de la propia relación (ya sea amistosa o sentimental, e incluso laboral) en sí se reducía de manera significativa.