Más de 70 vándalos que se manifestaron contra el gobierno, rompieron los vidrios de un banco y de una tienda de ropa, y realizaron pintas en las paredes de dos edificios de la calle 5 de Mayo, en el Centro Histórico, la tarde de ayer.
Alrededor de las 15:30 horas, los llamados anarquistas salieron del Monumento a la Revolución para llegar al Zócalo de la ciudad, donde pretendía tomar simbólicamente el Palacio Nacional.
En su marcha avanzaron por la Plaza de la República, Paseo de la Reforma, avenida Hidalgo y 5 de Mayo, donde los comercios bajaron sus cortinas para evitar posibles saqueos.
Sin embargo, con palos, martillos, piedras y patadas, los encapuchados destrozaron cinco cristales de una sucursal bancaria que se ubica en la esquina de 5 de Mayo y Palma.
En los cajeros automáticos del banco aún había clientes cuando ocurrieron los ataques, por lo que se resguardaron al fondo del pasillo.
En la siguiente esquina, otro grupo más los manifestantes, caracterizados por vestir de negro y cubrir su rostro, rompieron dos vidrios de una tienda de trajes y escribieron: “La moda es esto”.
Además, los vándalos rayaron con aerosoles tres comercios: un banco, un puesto de periódicos y una tienda de ropa. Las frases eran “Estamos en guerra”, “Quien controla tu mente, controla tu vida”, “Anarquía” y “Aquí seguimos observando”.
En el mitin, los anarquistas agredieron con piedras a fotógrafos y reporteros, quienes trataron de protegerse de los ataques.
Mientras, la policía capitalina no hizo acto de presencia, por lo que no hubo ningún detenido. Sólo había cerca de 40 elementos de la Policía de Investigación, quienes estaban identificados con playera blanca y pantalón negro.
A las 16:30 horas, los encapuchados llegaron al Zócalo de la ciudad, donde discutieron si tomaban simbólicamente el Palacio Nacional o se trasladaban a las instalaciones de Televisa Chapultepec.
“Tomemos simbólicamente el Palacio. Hay que saltarnos las vallas. Sé que tienen miedo, pero hay que vencerlo”, gritaba uno de los rijosos.
Posteriormente, comenzó a llover, por lo que se protegieron a un lado del Palacio del GDF, donde se dispersaron.
Dos horas antes de estas agresiones a comercios, 20 encapuchados realizaron pintas en la fuente Bicentenario, ubicada en el cruce del Paseo de la Reforma y avenida Juárez, tras lo cual se marcharon del lugar para incorporarse a las marchas que se realizaron por el Día del Trabajo.
Sobre los daños a las sucursales bancarias Santander y Bancomer, el Gobierno del DF informó en comunicado que buscó a los representantes legales de éstos “a fin de apoyarlos para que presenten la denuncia correspondiente”.
