Los recordados y olvidados del Panteón de Dolores

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Foto: larazondemexico

Entre las miles de tumbas visitadas por familiares y amigos este 2 de noviembre en el Panteón Civil de Dolores, el Lote de los Diputados Constituyentes de 1917 luce abandonado, con criptas rotas y olvidadas.

En un recorrido realizado por la Razón, se pudo constatar que las 218 tumbas de los legisladores quienes ayudaron a escribir la Carta Magna que en la actualidad rige a nuestro país, no fueron visitadas entre las cuales se encuentra: Samuel Castañón jefe del Partido Liberal Maderista en Zacatecas, Gerzain Ugarte quien Venustiano Carranza lo nombró miembro de su Estado Mayor con el grado de Capitán Primero, Manuel Aguirre Berlanga quien se unió en 1913 al "Plan de Guadalupe" organizado por Venustiano Carranza, entre otros.

El lugar que es parte del famoso cementerio, se encuentra rodeado por una reja verde cuyos barrotes comienzan a oxidarse.

Pero no sólo fueron las criptas de los políticos a quienes ni una flor de Cempazuchitl les llevaron, también fue la olvidada este Día de Muertos el lote de la Asociación Nacional de Actores (ANDA) ya que las criptas se mostraban solitarias.

Mientras que la Rotonda de Hombres Ilustres creada en 1872, a iniciativa del entonces Presidente de la República Sebastián Lerdo de Tejada, tampoco pudo ser visitada por las 60 mil personas que asistieron al Panteón ya que se encuentra en remodelación.

Personal de la delegación Miguel Hidalgo quien resguarda la zona decía “no se pude pasar por aquí, ni tomar fotos” con la intención de dispersar a los curiosos.

Por su parte, los policías pedían que tomaran otra ruta “por este pasillo no hay acceso, vete por ahí”, señalaba el elemento de seguridad.

El Panteón Civil de Dolores, es el más grande de América Latina con 240 hectáreas y cuenta con 700 mil lotes individuales con tres o cuatro niveles.

En otras áreas del gran cementerio, cada año, las tradiciones de Día de Muertos llenan el lugar de flores cempazuchitl, nube, terciopelo, rosas rojas y margaritas que colorean el panorama fúnebre del panteón, mientras que el ambiente es musicalizado por grupos que ofrecen una gran gama de géneros que van desde las rancheras hasta cumbias; por cada canción cobran 80 pesos.

Cientos de familias llevan diferentes platillos como tostadas de pollo, tlacoyos, gorditas y tacos para colocarlos como ofrenda sobre las tumbas de sus seres queridos.